La Fed deja perplejos a los inversores

Los principales índices bursátiles europeos cerraron ayer al alza en una sesión de idas y vueltas en la que el precio del crudo siguió ejerciendo de principal referencia. De esta tónica general se desmarcó el FTSE Mib italiano, que sigue lastrado por el mal comportamiento del sector bancario, el cual mantiene una elevada ponderación en el índice. En este sentido, señalar que las fuertes provisiones dotadas por el Royal Bank of Scotland (RBS) pesaron en el comportamiento del sector en toda Europa. Por su parte, los resultados publicados por el Santander, que estuvieron bastante en línea con lo esperado, fueron acogidos con frialdad por los inversores.

En lo que hace referencia al precio del crudo, cuyo giro al alza durante las últimas horas de la sesión permitió a los índices europeos terminar la jornada con ganancias, señalar que terminó el día con fuertes avances tras haberlo iniciado claramente a la baja. Este cambio de tendencia fue debido a dos factores: i) la publicación en Estados Unidos de un incremento de los inventarios de petróleo durante la última semana algo inferior al temido por los inversores (aún así aumentaron en más de 8 millones de barriles), y ii) la constatación de que existen conversaciones entre algunos miembros de la OPEP y Rusia con objeto de intervenir en el mercado de petróleo para impulsar al alza los precios. No creemos que este acuerdo vaya a ser fácil y que vaya a tener resultados positivos, dada la sobrecapacidad de producción existente en el mercado. No obstante, sólo la posibilidad de que la OPEP y productores "no OPEP" estén negociando provocó ayer el rebote del precio de esta materia prima, principalmente por el cierre de posiciones cortas. De seguir las conversaciones en los próximos días no es descartable que se acelere el cierre de las mismas con el consiguiente impacto positivo en el precio del crudo, algo que daría cierta tranquilidad a los mercados de valores. 

Pero si en Europa la sesión fue de menos a más, en Estados Unidos fue al contrario. Desde primera hora del día las fuertes caídas de las cotizaciones de dos "pesos pesados": Apple y Boeing (ambas compañías presentaron buenas cifras trimestrales aunque sus expectativas de negocio para los próximos meses defraudaron a los analistas) lastraron el comportamiento de los índices estadounidenses pero, al igual que ocurrió en Europa, el giro al alza del precio del crudo permitió a estos recuperar terreno. Sin embargo, el tan esperado comunicado del Comité de Mercado Abierto de la Fed (FOMC) tuvo un impacto muy negativo en el sentimiento del mercado, provocando un giro a la baja de los índices, que cerraron la sesión con importantes descensos. Si ayer decíamos que la Fed podría hacer bastante para tranquilizar a las Bolsas, dando a entender que por el momento no iba a seguir subiendo sus tasas de interés oficiales mientras que no se aclarara el escenario económico mundial, la realidad es que en su comunicado el banco central estadounidense no estuvo demasiado "hábil". Así, y tras reconocer que están preocupados por el comportamiento de la economía mundial y por el comportamiento de los mercados financieros y señalar la baja inflación como un riesgo a tener en cuenta, la Fed no quiso "retirar de la mesa" la posibilidad de subir sus tipos de interés en la reunión de marzo. Este hecho dejó a muchos inversores perplejos ya que, en el fondo, supone una contradicción. La interpretación que le damos es que si los mercados financieros se calman, la Fed seguirá subiendo sus tipos de interés dado el buen momento por el que atraviesa el mercado laboral y la pujanza del consumo privado en el país. Malas noticias para unos mercados muy dependientes de la elevada liquidez que han venido inyectando desde hace años los bancos centrales en el sistema y que temen que ésta comience a reducirse a partir de ahora. 

Esperamos que, tras la negativa reacción de Wall Street al comunicado de la Fed, las Bolsas europeas abran hoy a la baja. La jornada, por su parte, será intensa en lo que a la publicación de cifras macro hace referencia, entre las que destacaríamos el dato preliminar de enero de inflación en Alemania; la primera estimación del PIB británico del cuarto trimestre; las ventas minoristas de diciembre en España; los índice de confianza sectoriales de enero en la Zona Euro; y los pedidos de bienes duraderos y las ventas pendientes de viviendas de diciembre, ambos en Estados Unidos. Todos estos datos servirán a los inversores para hacerse una idea del "momento" por el que atraviesan las distintas economías occidentales.

Pero, además, durante la sesión muchas compañías cotizadas darán a conocer sus cifras trimestrales, destacando en Europa al Deutsche Bank, a la farmacéutica Roche, a la minera Anglo American y a la industrial Electrolux, y en Estados Unidos a Ford, Amazon y Microsoft, estas dos últimas ya con el mercado estadounidense cerrado. Ayer, tras el cierre de Wall Street, Facebook dio a conocer unas cifras que superaron holgadamente lo esperado por los analistas, lo que impulsó con fuerza al alza sus acciones en operaciones fuera de hora (subieron más del 12%).

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