La compra del edificio España por el grupo chino Wanda Group a Banco Santander nos ha hecho ser conscientes de que algo está cambiando. Del famoso "todo a cien", China nos está comprando desde hoteles hasta empresas míticas del sector agroalimentario como Osborne. Wanda, sin ir más lejos, aliviará también las maltrechas arcas del Atlético […]
Dirigentes Digital
| 19 oct 2014
La compra del edificio España por el grupo chino Wanda Group a Banco Santander nos ha hecho ser conscientes de que algo está cambiando. Del famoso "todo a cien", China nos está comprando desde hoteles hasta empresas míticas del sector agroalimentario como Osborne. Wanda, sin ir más lejos, aliviará también las maltrechas arcas del Atlético de Madrid inyectándole una inversión cercana a los 50 millones de dólares.
Y este mismo conglomerado, presidido por un hasta ahora desconocido Wang Jianlin, también planea construir su propio "Eurovegas" en Madrid. Hainan posee ya un 20% de NH Hoteles. Y las inversiones chinas en España, aún siendo todavía modestas, van a seguir incrementándose durante los próximos años.
DIRIGENTES ha podido hablar, en Pekín, con quien quizás más información tiene sobre este fenómeno nuevo: Ivana Casaburi, directora del ESADE China-Europe Club.
ESADE ha presentado recientemente, aquí en Pekín, un exhaustivo informe sobre las oportunidades de inversión que actualmente ofrecen países europeos como España a China ¿Cuáles son?
El China-Europe Club de ESADE, que yo dirijo, identifica a España como una puerta para entrar en Europa. Pero los chinos están interesados, fundamentalmente, en sectores con alto valor agregado que puedan servir al desarrollo del propio mercado interno chino. Estamos hablando de telecomunicaciones, energías renovables como la eólica, biotecnología e infraestructuras. Existen muchas empresas españolas en estos sectores que despiertan un gran interés entre los inversores chinos actualmente. Por otra parte, yo misma he presenciado el cierre de acuerdos dentro del sector agroalimentario recientemente. Y, considerando que España es una de las primeras potencias turísticas mundiales por excelencia, China también está comprando hoteles. En Mallorca, sin ir más lejos, tenemos dos casos donde los chinos han comprado varios hoteles para adaptarlos después al gusto del turista chino. El turismo chino hacia España y Europa tiene un potencial de desarrollo enorme. Y esto, evidentemente, aumenta las opciones de atraer inversión china en España. Finalmente, los inversores chinos también están invirtiendo en España como socio natural de América Latina. Creen más oportuno desembarcar en Latinoamérica con cualquier empresa española que intentándolo ellos solos. Y no podemos olvidar tampoco que España sigue siendo, pese al momento económico actual, un gran mercado de consumo. China, por tanto, también está invirtiendo en España para dar salida a sus propios productos. Los directivos chinos que invierten en España, sobre todo, destacan nuestras infraestructuras y la buena calidad de vida. Les resulta atractivo invertir en muchos sentidos y vemos también como la inversión china hacia España, inédita hace tan solo unos años, sigue aumentando exponencialmente desde 2009.
¿Piensas entonces que con la crisis han cambiando significativamente los flujos de inversión y comercio? ¿Está China ahorrando menos y consumiendo e invirtiendo más?
Sin duda. El modelo económico que conocimos antes de la crisis del año 2008 ya no existe. España tiene deudas y China tiene mucha liquidez. Si antes era España la que consumía e invertía ahora es sencillamente al revés. Se está desarrollando en China, además, un mercado de empresas privadas que deben mirar hacia el exterior para desarrollarse. Tienen muchísimo cash, pero si quieren seguir evolucionando tienen que operar en mercados globales como Europa o Estados Unidos. Y esto hace que el interés sea mucho mayor ahora en comparación con años atrás. Mi previsión es que, pese a seguir teniendo bajos niveles de inversión china en España, ésta seguirá creciendo de forma rápida. Vamos a ver cada vez más empresas chinas, privadas también, en España. Estas compañías chinas van a buscar siempre una relación ganador-ganador. Ellos quieren complementar sus puntos fuertes con los nuestros. China tiene mercado y una mano de obra muy competitiva, más barata, pero también cualificada. España, por otra parte, lo que ofrece es tecnología y alto valor agregado. Personalmente pienso que, españoles y chinos, podemos constituir juntos empresas globales y muy competitivas.
China empezó comprándonos la deuda pública, en los peores momentos de 2010, hasta quedarse con el 20% del sector no residente. Luego se han interesado por la economía real, pero es aquí donde algunos inversores lamentan cierto proteccionismo: Europa no les abre tan fácilmente las puertas como cuando compran bonos. ¿Es así?
Nosotros, desde ESADE, hemos elaborado varios estudios sobre la opinión que los inversores chinos tienen acerca del clima empresarial en España. Y, si bien en Europa pueden encontrarse con algunas dificultades, España lo consideran un país muy abierto. Piensan que nuestras infraestructuras portuarias son muy buenas. Que los recursos humanos son adecuados. Opinan que sus productos son bien acogidos en España. Y subrayan, esto es importante, una actitud positiva hacia China. Saben que deben trabajar para cambiar la percepción del producto chino como un bien barato o de poca calidad. Pero reconocen que es una tarea pendiente propia. No tiene nada que ver con el proteccionismo. Pienso que la última visita del presidente español a China, Mariano Rajoy, ha servido también para impulsar las relaciones políticas. Porque, no debemos olvidarlo, Pekín nos consideró hace bien poco el mejor amigo de China en Europa. Y eso es importante que lo aprovechemos.