La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó esta madrugada la propuesta de reforma fiscal impulsada por el presidente, Donald Trump, que implica la reducción de varios impuestos para empresas, familias y grandes fortunas. El proyecto fue aprobado en la cámara baja estadounidense con el respaldo unánime de todos los representantes republicanos, sumando 227 votos a favor y 205 en contra. El presidente de la Cámara, el republicano Paul […]
Dirigentes Digital
| 17 nov 2017
La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó esta madrugada la propuesta de reforma fiscal impulsada por el presidente, Donald Trump, que implica la reducción de varios impuestos para empresas, familias y grandes fortunas. El proyecto fue aprobado en la cámara baja estadounidense con el respaldo unánime de todos los representantes republicanos, sumando 227 votos a favor y 205 en contra. El presidente de la Cámara, el republicano Paul Ryan, ha asegurado que este plan fiscal significará un alivio para la clase media de más de mil dólares anuales en impuestos por familia. Para entrar en vigor, el proyecto debe ser ratificado ahora por el Senado, donde ya se está estudiando otra propuesta fiscal menos drástica y en el que la mayoría republicana de 4 escaños no ha sido capaz de ponerse de acuerdo recientemente para derogar la reforma sanitaria impulsada por el ex presidente Barack Obama. La reforma, que el propio Trump ha calificado de “la más importante en los últimos 30 años”, supone un recorte en impuestos de 1,4 billones de dólares para los próximos 10 años. El Partido Demócrata critica que la rebaja fiscal sólo beneficiará a las rentas de más de un millón de dólares anuales y supone elevar el déficit 1,5 billones. El proyecto impulsado por Trump incluye rebajar el impuesto de sociedades al 20%, por debajo de la media de la mayoría de países de la OCDE, reducir de siete a cuatro los tramos fiscales, eliminar el impuesto de sucesiones excepto a las herencias superiores a 5,5 millones de dólares y aumentar las deducciones y exenciones para familias. Los demócratas critican que la rebaja de impuestos se realizará a costa de derogar programas de asistencia social y de aumentar las cargas a las rentas entre 40.000 y 50.000 dólares anuales, que representan a la mayoría de la clase media. El proyecto deberá superar ahora el rechazo de la oposición y la división en las filas republicanas en el Senado, que incluyen a aquellos que critican que la rebaja fiscal no es ambiciosa porque está limitada a diez años y los que se oponen a recortar fondos a la sanidad, la educación y los programas sociales para aumentar las exenciones a las grandes fortunas. La propuesta de Trump cuenta también con el rechazo de 400 multimillonarios estadounidenses, como Mark Cuban o Steven Rockefeller, que se han agrupado en la organización Responsible Wealth (Riqueza Responsable), para exigir a la Casa Blanca que no les rebaje los impuestos a costa de aumentar las desigualdades. De hecho, calculan que, de aprobarse la reforma fiscal, generaría pérdidas de 269.000 millones de dólares en un decenio, “más de lo que se gasta en conjunto en la Agencia del Medicamento, el Centro de Control de Enfermedades, la Agencia de Protección Ambiental y los programas contra la pobreza”, tal y como han asegurado en una carta al Congreso de EEUU.