La Renta Variable sigue siendo la opción preferida por los inversores, canalizando el 65 % de estos flujos. En concreto, la Renta Variable europea ha sido la más atractiva, especialmente después de los resultados obtenidos en las elecciones francesas, que despejaron las dudas sobre el futuro de la Unión Europea, según los datos proporcionados por […]
Dirigentes Digital
| 20 jul 2017
La Renta Variable sigue siendo la opción preferida por los inversores, canalizando el 65 % de estos flujos. En concreto, la Renta Variable europea ha sido la más atractiva, especialmente después de los resultados obtenidos en las elecciones francesas, que despejaron las dudas sobre el futuro de la Unión Europea, según los datos proporcionados por Amundi. A continuación, encontramos la Renta Variable emergente que continúa el rebote iniciado en 2016, atrayendo más de 2.000 millones de euros. La Renta Variable americana, por otro lado, experimentó un cambio en la tendencia con reembolsos de más de 1.000 millones de euros en el segundo trimestre, al arbitrar los desde Estados Unidos hacia la Eurozona. Los flujos hacia productos Smart Beta ascendieron a 2.200 millones de euros, con value y mid cap como factores más populares, en línea con lo observado el primer trimestre. En el universo de la Renta Fija, la situación es esencialmente la misma que en la parte de Renta Variable, con una continuación de las tendencias observadas el primer trimestre. Por lo tanto, la deuda de países emergentes sigue recibiendo la mayor cantidad de flujos, con casi 7.000 millones de euros en la primera mitad del año. En lo que a crédito respecta, los bonos flotantes siguen siendo favorecidos por los inversores, los cuáles le han asignado 3.000 millones de euros desde comienzos de años. A continuación, se encuentra la deuda corporativa americana, que continúa ofreciendo rentabilidades mucho más altas que sus homólogas europeas, atrayendo flujos cercanos a los 2.000 millones de euros. En un ambiente continuo de bajos tipos de interés, la búsqueda de rentabilidades sigue siendo el mayor conductor en la asignación de Renta Fija. Los rembolsos se han concentrado en los bonos americanos ligados a la inflación con más de 1.000 millones de euros. Las expectativas de subidas de precios en Estados Unidos tras la elección de Donald Trump han sido ampliamente revisadas a la baja en los últimos meses. Finalmente, se ha apreciado un renovado interés por las materias primas. Esta clase de activo ha recibido más de 2.400 millones de euros durante la primera mitad de año, superando ya la cantidad generada durante todo 2016.