Contra todo pronóstico, son ellos, en un 76,2% y no ellas, con un 75%, los que declaran darle mucha importancia y dedicación al cuidado de la imagen. Al menos eso es lo que refleja el Informe Beauty elaborado por Privalia, el outlet online. Y las cifras económicas le siguen de cerca, ya que según los […]
Dirigentes Digital
| 20 jun 2017
Contra todo pronóstico, son ellos, en un 76,2% y no ellas, con un 75%, los que declaran darle mucha importancia y dedicación al cuidado de la imagen. Al menos eso es lo que refleja el Informe Beauty elaborado por Privalia, el outlet online. Y las cifras económicas le siguen de cerca, ya que según los resultados que presentó la Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética (STANPA), el consumo de perfumes y cosméticos creció un 3,25% en 2016 hasta los 6.600 millones de euros. Y eso que según Privalia, el 70% de los españoles considera que los productos de belleza son muy caros y gastan de media menos de 50 euros al mes. Si se unen además datos tan curiosos como que la moda de los selfies y el auge de las redes sociales ha incrementado el consumo de pintalabios en un 12%, no resulta descabellado pensar que las marcas están teniendo que sofisticar sus productos y dar un paso más allá, donde la imaginación, los productos naturales, los resultados reales o incluso el cuidado del medio ambiente, sean el claim de venta casi más que el efecto que producirá en nuestro aspecto físico. Nina Priorat es una línea ecológica de cosméticos que se elabora con ingredientes y frutos cultivados en las tierra, y que tiene Denominación de Origen por la comarca vitivinícola de la que procede. Los productos poseen certificación ecológica a partir de los frutos procedentes de fincas de la zona, de forma natural y artesana. Directamente desde Corea llega Lagom, una firma basada en la cosmecéutica y desarrollada por dermatólogos expertos en citobiología, cosmética, dermocosmética y medicina oriental y con el I+D, lo healthy y eco-friendly y sobre todo la responsabilidad social corporativa del munod de la cosmética coreana como bandera. Otros como Wherteimar llevan una base de fruta en sus artículos. La firma suiza utiliza principios activos extraídos todos de la naturaleza para la elaboración de sus productos. Pero tiene una peculiar confianza en la piña. Tanta, que le ha llevado a crear una mascarilla facial con esta fruta como ingrediente estrella. Orly da un paso más allá y se toma al pie de la letra aquello de accesible para todos. Y es que la firma norteamericana ha lanzado al mercado Halalpaint, la primera colección de esmaltes dedicadas única y exclusivamente a las mujeres musulmanas que, a la hora de proceder en algunos de los rituales religiosos, no pueden llevar nada en sus uñas. Están elaboradas con vitamina C, B5 y aceite de argán y permiten que pueda entrar el oxígeno y el agua.