Tradicionalmente, las farmacéuticas siempre han sido consideradas conservadoras y sector refugio en tiempos turbulentos. A pesar de todo, no suelen ser los valores en los que más se fijan los inversores, incluso en tiempos de incertidumbre como el que ahora vivimos con la crisis griega de trasfondo. El heterogéneo grupo de empresas que conforman el […]
Dirigentes Digital
| 09 jul 2015
Tradicionalmente, las farmacéuticas siempre han sido consideradas conservadoras y sector refugio en tiempos turbulentos. A pesar de todo, no suelen ser los valores en los que más se fijan los inversores, incluso en tiempos de incertidumbre como el que ahora vivimos con la crisis griega de trasfondo.
El heterogéneo grupo de empresas que conforman el sector a nivel internacional muestra un comportamiento dispar, aunque la mayoría logra crecimientos de dos dígitos en el parqué bursátil. ´Victimas‘ de la elevada volatilidad derivada de los riesgos producidos por la pérdida de exclusividad en patentes, retrasos o problemas en el lanzamiento de nuevos medicamentos, están viviendo un periodo muy convulso de fusiones y adquisiciones.
Entre los más sonados destaca la compra de Pharmacyclics, fabricante de un "inhibidor aprobado para tratar tres tipos de cáncer de sangre", por AbbVie. La operación alcanzó los 21.000 millones de dólares después de conocer que AbbVie pagó 261,25 dólares por acción.
Además, en una de las mayores operaciones del sector hasta la fecha en 2015, la canadiense Valeant Pharmaceuticals compraba a la especialista en medicamentos gastrointestinales Salix Pharmaceuticals por 158 dólares por acción. La compra-venta, que se llevó a cabo en efectivo, ascendió a 10.000 millones de dólares.
Prueba del éxito de estas compras es que AbbVie logra una revalorización del 22% en los últimos doce meses, hasta cambiarse por 68 dólares. En el caso de Valeant Pharmaceuticals la subida es más espectacular tras avanzar un 84% en Wall Street, hasta los 224 dólares.
Subidas de dos dígitos
Pero fuera de estas compañías, Novartis sigue posicionándose en buen lugar un clásico del sector: Novartis. La farmacéutica, que cuenta con una capitalización de 261.710 millones de dólares, ha repuntado casi un 11% desde julio del año pasado hasta situarse en los 99 dólares por acción. Por su parte, uno de sus principales rivales, Pfizer, también suma cerca de un 12% en los últimos doce meses.
Con una capitalización bursátil más ‘humilde’ que se acerca a los 99.000 millones de dólares encontramos a Eli Lilly, que sube un 40% desde julio. En cambio, Merck se convierte en el farolillo rojo tras perder un 1%, hasta los 57 dólares. En la misma línea se sitúa GlaxoSmithKline, que se deja más de un 22%; en el lado contrario se coloca Bristol-Myers Squibb, que sube un 42%.
En el mercado español nos encontramos con valores como Grifols que, aunque en los últimos doce mese se deje un 10% de su valor en bolsa, sí que está mostrando un mejor comportamiento en lo que llevamos de año. Sus acciones, que cotizan en los 36 euros, tiene un PER (precio/beneficio por acción de 25,80) muy alejado del que llegó a registrar hace unos años, lo que hace que sus múltiplos sean competitivos. En este sentido, Rovi, con un PER 27, y Almirall, cuyo PER es 6,26 también están bien situadas.
Consejos para invertir con ‘salud’
Si se decide a invertir en valores farmacéuticos, antes debe tener en cuenta una serie de pautas:
1. El sector sigue considerándose defensivo porque, a pesar de las crisis o desaceleraciones del mercado, se seguirán consumiendo fármacos.
2. El principal problema de este tipo de compañías se sitúa en lo que los expertos denominan el riesgo de genéricos: la pérdida de exclusividad en patentes, retrasos o problemas en el lanzamiento de nuevos medicamentos.
3. Los inversores deben estar muy atentos a las novedades en la aprobación de productos. La evolución en cartera de proyectos es tan importante como la publicación de resultados.
4. Otro problema del sector es su escasa rentabilidad por dividendo y un gasto importante que no cesa hasta la fase de comercialización.