En los últimos tiempos se ha producido una mezcla entre una demanda creciente y unos precios favorables del combustible han aumentado la rentabilidad de la mayoría de las aerolíneas. El cóctel ha sido el perfecto, aunque a pesar de estas buenas condiciones, el mercado europeo se ha visto sacudido por las insolvencias de Alitalia, Air Berlin y Monarch […]
Dirigentes Digital
| 16 oct 2017
En los últimos tiempos se ha producido una mezcla entre una demanda creciente y unos precios favorables del combustible han aumentado la rentabilidad de la mayoría de las aerolíneas. El cóctel ha sido el perfecto, aunque a pesar de estas buenas condiciones, el mercado europeo se ha visto sacudido por las insolvencias de Alitalia, Air Berlin y Monarch Airlines este año, según apunta Scope en un último informe sobre el sector. La pregunta que surge es si la todavía fragmentada industria europea comenzará una nueva ronda de consolidación siguiendo un proceso similar al del mercado americano. Scope cree que este sector no está siendo forzado a una consolidación acelerada. Sin embargo, los principales retos de la industria crearán una necesidad urgente de consolidación a medio y largo plazo con el fin de mejorar estructuralmente la rentabilidad de la industria y las métricas de crédito. Por el momento, la consolidación probablemente seguirá siendo una función de la adquisición de activos y slots de las líneas aéreas con problemas o colaboraciones. El mercado de aerolíneas europeas continúa estando fragmentado, aunque se pueden observar tendencias de consolidación. Aun así, los cinco principales grupos de aerolíneas Lufthansa, IAG, Air France-KLM, Ryanair y easyjet sólo cubren alrededor del 45% del tráfico aéreo europeo, en comparación con el 80% de cobertura de los cinco principales operadores en Estados Unidos. El largo y doloroso proceso de consolidación que ha sufrido el mercado estadounidense, incluyendo muchos impagos, puede ser acreditado en última instancia con la transformación estructural de la rentabilidad de la industria aérea estadounidense, que ha conducido a obtener márgenes medios de EBITDAR y EBITDA de alrededor del 30% y 20%, respectivamente, en comparación con el 19% y el 10% de las aerolíneas europeas. En la opinión del equipo de Scope, la presión para consolidar aún más el sector podría aumentar una vez que las sobrecapacidades que golpearon al mercado y las aerolíneas de bajo coste (LCCs) encuentran que sólo pueden lograr un mayor crecimiento y cuotas de mercado reduciendo las tarifas aéreas medias y los costes de rentabilidad a corto plazo. Retos persistentes para las aerolíneas europeas Las estadísticas favorables para la mayoría de las compañías europeas en términos de factores de carga y rentabilidad no deben ocultar el hecho de que los retos de la industria, especialmente para las aerolíneas tradicionales, siguen siendo grandes. En algunos mercados, los precios agresivos de las LCCs ya han tomado la pole position adelantando a los principales operadores nacionales. Desde el punto de vista de Scope, las recientes insolvencias de Air Berlin, Alitalia, así como la más reciente de Monarch Airlines, han vuelto a poner de manifiesto las debilidades estructurales del sector. Por otra parte, la pelea sobre los activos de Air Berlin (con ofertas iniciales de Lufthansa / Eurowings, IAG, easyjet, Condor / Niki y de fuera la industria) demuestra el apetito por aumentar la cuota de mercado. En los últimos años, los precios de los combustibles de aviación y los elevados factores de carga han disimulado los retos persistentes del sector y la necesidad de ajustes estructurales de los costes. Por otro lado, se producen mayores vientos políticos en contra para las líneas aéreas europeas debido al ambicioso objetivos de emisiones a ojos de estos expertos. De este modo, es probable que estos desafíos espoleen al mercado si las condiciones macroeconómicas se deterioran y el sector se ve afectado por las sobrecapacidades. Cualquier escenario de este tipo obligaría a la industria a impulsar una verdadera consolidación. Así pues, Scope cree que la presión para una mayor consolidación del sector podría aumentar a largo plazo, dada la mayor saturación del mercado y el aumento de las sobrecapacidades derivadas de los muy ambiciosos planes de expansión de las LCC europeos. Como consecuencia, algunos de los pequeños y medianos operadores de Europa, así como las LCC nicho, que son demasiado pequeñas para competir eficazmente en los mercados de largo recorrido frente a los grandes operadores y demasiado caros para competir eficazmente en los trayectos cortos con las grandes LCC, pueden arruinarse a menos que logren encontrar la protección dentro de un grupo más grande.