A punto de entrar en el segundo semestre del año, los frentes que han quedado abiertos en la primera parte de 2014 seguirán pesando sobre las decisiones de inversión. El temor a la baja inflación en la eurozona, los próximos movimientos de los bancos centrales y la posible sobrevaloración de algunos activos seguirán marcando el […]
Dirigentes Digital
| 30 jun 2014
A punto de entrar en el segundo semestre del año, los frentes que han quedado abiertos en la primera parte de 2014 seguirán pesando sobre las decisiones de inversión. El temor a la baja inflación en la eurozona, los próximos movimientos de los bancos centrales y la posible sobrevaloración de algunos activos seguirán marcando el camino de los inversores a juicio del Departamento de Análisis de Bankinter.
1. INFLACIÓN vs DEFLACIÓN
Dos riesgos y el mismo temor. Mientras la inflación incipiente podría mover a algunos bancos centrales a actuar subiendo tipos, el riesgo de deflación podría forzar a otros a adoptar aún más medidas de relajación monetaria. Según los analistas de Bankinter, el primer caso estaría representado por EE UU, donde el IPC se encuentra en +2%, mientras que el segundo por la Unión Europea (inflación de solo +0,5% y con riesgo de caer aún más).
En este escenario, la pregunta es si se podría producirse un desacoplamiento mayor entre las políticas monetarias a ambos lados del Atlántico, y su impacto sobre el mercado de bonos allí donde la inflación haga acto de presencia. Es decir, en EE UU. A juicio de los expertos, este riesgo estaría limitado, pues al organismo presidido por Janet Yellen "le costará mucho trabajo pasar de las palabras (forward guidance) a los hechos (subir tipos) por temor – igual que en el caso del Banco de Inglaterra (BoE) ? a frustrar la mejora de sus respectivas economías".
2. BANCOS CENTRALES vs CICLO ECONÓMICO.
Desde Bankinter advierten que la posibilidad del inicio de un endurecimiento de las políticas monetarias de la Fed y el BoE a lo largo de 2015 "representa no sólo un debate, sino todo un riesgo para el dinamismo del ciclo económico y para la actual expansión del mercado". Explican que aunque en Japón y en Europa aún no se plantee este cambio de perspectiva, "si se materalizara en EE UU y/o Reino Unido sufrirían un impacto innegable".
Aún así, el mensaje es de tranquilidad para los inversores. Aunque los expertos admiten que es probable que los tipos empiecen a subir en algún momento de 2015, la probabilidad de este cambio de actitud es que se produzca "más tarde de lo que generalmente se piensa".
3. FLUJO DE FONDOS vs VALOR DE LOS PRINCIPALES ACTIVOS
"Es innegable que las actuales valoraciones de los principales activos (bolsas, bonos, etc) están favorablemente influidas por un flujo de fondos muy poderoso, cuyo origen principal se encuentra aún en las medidas monetarias adoptadas por los bancos centrales", explican los expertos.
En este escenario, y si dichas medidas empiezan a ser retiradas, ¿cuál sería el impacto en el valor de dichos activos? ¿Puede dar lugar a una corrección significativa de las valoraciones? Desde el Departamento de Análisis de Bankinter consideran que "los flujos de liquidez de los bancos centrales han dado como resultado una salida rápida de la crisis mediante monetarismo – que era, sin duda, el objetivo fundamental a conseguir -, pero han podido provocar como contrapartida sobrevaloraciones puntuales en ciertas clases de activos".
Los expertos hablan en especial del mercado de bonos, tanto soberanos como corporativos. Aún así, aún ven algo de recorrido en ciertos segmentos de este mercado, como el 10 años español, "que pensamos puede llegar (TIR) hasta 2,20%. Otros, sin embargo, pueden tener asociado un riesgo implícito, y apuntan a la TIR del bund alemán, que podría llegar a rondar el 1,60%. "Una parte no despreciable del high yield podría encuadrarse en este segundo grupo", aseguran.