La compañía ganó en el ejercicio 2016 301 millones de euros, lo que supone un 77% más que en 2016. En estas cifras se incluye un impacto negativo de 25 millones de euros por la consolidación del 50% de Adwen. La compañía registró en el cuarto trimestre del año una entrada de pedidos de 1.386 MW, un 33% más que en el mismo periodo de 2015. En total, en el ejercicio registraron una cifra de pedidos de 4.687 MW, un 21% más anual. Gamesa atribuye estas cifras a “la fortaleza de la actividad comercial, resultado de un posicionamiento competitivo orientado al crecimiento”. Además, el grupo ha comunicado que comienza 2017 con una cobertura sobre el volumen de ventas previsto de un 63%, similar al nivel al comienzo de 2016. Las ventas han crecido un 32% hasta los 4.612 millones de euros. El Ebit, por su parte, ha crecido un 48% anual y ha escalado hasta los 477 millones de euros. Gamesa explica que ha controlado la inversión en activos y capital circulante en un entorno de crecimiento rentable, lo que le ha permitido obtener una generación de caja libre neta récord de 423 millones de euros, más del doble que la generación de caja de 2015. Con ello, ha cerrado el ejercicio con una posición de caja neta en balance de 682 millones de euros, en línea con el objetivo de solidez financiera de la compañía.