El pilar de la reforma pivota sobre el IRPF. El gravamen máximo bajará del 52% al 47% el próximo año y el mínimo pasará del 24,75% al 20%. También se elevan los mínimos personales y las exenciones por hijos. Si actualmente todos los contribuyentes cuentan con un mínimo exento de tributar de 5.151 euros, éste pasará […]
Dirigentes Digital
| 30 dic 2014
El pilar de la reforma pivota sobre el IRPF. El gravamen máximo bajará del 52% al 47% el próximo año y el mínimo pasará del 24,75% al 20%. También se elevan los mínimos personales y las exenciones por hijos. Si actualmente todos los contribuyentes cuentan con un mínimo exento de tributar de 5.151 euros, éste pasará a ser de 5.550 euros. Es decir 409 euros más en el sueldo neto a final de año.
También afectará a las exenciones por hijo que pasará de 1.836 euros a 2.400 euros, por el segundo se pasará de 2.040 a 2.700 euros anuales, por el tercero, de 3.672 a 4.000 euros anuales y por el cuarto y siguientes, de 4.185 a 4.500 euros.
En cuanto a las rentas de capital, se elimina la exención de 1.500 euros, pero se bajan los tipos impositivos. Hasta 6.000 euros bajará su tributación del 21% al 20%. Desde 6.000 hasta 50.000 euros pasan del 25% al 22%. Y partir de 50.000 euros, el tipo de gravamen se situará en el 24% frente al actual 27%. Los tipos en 2016 volverán a reducirse hasta el 19%, 21% y 23%, respectivamente.
Otra de las novedades, será la exención de las plusvalías para mayores de 65 años si su destino es la constitución de una renta vitalicia que complemente la pensión
Donde los cambios no son favorables es el incremento de renta por venta de vivienda. Se eliminan los coeficientes de corrección monetaria, aplicables en las transmisiones de inmuebles, que permitían corregir el valor de adquisición por el efecto de la inflación, para las viviendas adquiridas a partir de 1995. A efectos prácticos, por una vivienda que fue adquirida en el periodo comprendido por 230.000 euros y se vende por 300.000, el contribuyente pagará alrededor de 10.000 euros. La medida está limitada para los inmuebles comprados antes de 1995. Se mantienen pero limitado a 400.000 euros.
Además, elimina la deducción por alquiler de vivienda para los arrendatarios en los nuevos contratos de 2015. En la declaración de la renta de 2014 se mantendrá. Así como, se baja la reducción del 100% al 60% general para los arrendadores que alquilen la casa a menores de 30 años.