Sobre el Plan Juncker, como se conoce al plan de inversiones de la Comisión Europea, recae toda la responsabilidad para estimular el crecimiento de la economía europea, después de años de austeridad. El actual presidente del Ejecutivo comunitario logró arrancar de los socios hace casi un año el ‘Plan Marshall europeo’ para impulsar el crecimiento […]
Dirigentes Digital
| 31 may 2016
Sobre el Plan Juncker, como se conoce al plan de inversiones de la Comisión Europea, recae toda la responsabilidad para estimular el crecimiento de la economía europea, después de años de austeridad. El actual presidente del Ejecutivo comunitario logró arrancar de los socios hace casi un año el ‘Plan Marshall europeo’ para impulsar el crecimiento con inversiones hasta 2018 con el objetivo de inyectar 315.000 millones a la economía. La Comisión Europea hace hoy balance de situación después de doce meses de su puesta en marcha.
Según fuentes comunitarias, se ha cumplido con el 32% del objetivo del primer año al lograr financiación por 100.000 millones. El plan fue fuertemente criticado porque inicialmente contaba con solo 21.000 millones del presupuesto comunitario y otros 5.000 millones eran aportados por el Banco Europeo de Inversiones (BEI). El resto hasta 100.000 los millones proviene de financiación privada a proyectos y empresas aprobados por la Comisión, que todavía no se ha materializado. Hasta ahora solo se han asignado 6.500 millones, de los 12.800 millones que dispone el Fondo Europeo de Inversiones Estratégicas.
Durante este tiempo se han aprobado 64 grandes proyectos de infraestructuras e innovación, seis de ellos en España, y se han cerrado acuerdos de financiación para pymes por valor de 3.500 millones, de los cuales 242 millones han ido a parar a empresas españolas. España es el quinto país que más se ha beneficiado del Plan Juncker de los 28 países que se pueden acoger al fondo y el último de las grandes economías españolas, por detrás de Italia, Francia, Reino Unido y Alemania.
España sólo ha cerrado ocho acuerdos de financiación para pymes, tres veces menos que Italia, y muy inferior a las cifras de los motores económicos de Europa. Fuentes comunitarias señalan que "España lo puede hacer mejor y presentar más proyectos y más ambiciosos". El país se encuentra a la cola porque, al contario que los Fondos de Cohesión o Desarrollo, no hay cuotas u objetivos para cada país, sino necesita que los Estados sean proactivos para solicitar recursos financieros.
Desde el comienzo se criticó al Gobierno de España por la pasividad a la hora de presentar proyectos y que la mitad estuvieran destinados al sector energético. A los 25 acuerdos de financiación para pymes en Italia, o la veintena de Francia, contrasta con los 8 de España que ha permitido financiar 242 millones. "Hay un amplio margen para que España eleve la financiación", explican funcionarios de Bruselas. La expectativa de la Comisión es que en los próximos años se financie 4.400 millones en beneficio de más 17.600 pymes.
Por la parte de grandes proyectos, España está en línea con Alemania y Reino Unido con la financiación de seis grandes inversiones que han acaparado 500 millones de euros.
Las mismas fuentes adelantan que hoy al Comisión Europea prevé ampliar más allá de 2018 el Plan Juncker, no sólo en términos de vigencia, sino también de dotación.