Una vez que se va deshilachando las ideas de los bancos centrales, parece que se puede clarificar la idea de dónde se pueden encontrar las principales oportunidades de inversión. Todo ello, pese a que siguen permaneciendo ciertas incertidumbres, que parece que están enquistadas. Como por ejemplo, si será capaz o no Donald Trump de aplicar […]
Dirigentes Digital
| 03 oct 2017
Una vez que se va deshilachando las ideas de los bancos centrales, parece que se puede clarificar la idea de dónde se pueden encontrar las principales oportunidades de inversión. Todo ello, pese a que siguen permaneciendo ciertas incertidumbres, que parece que están enquistadas. Como por ejemplo, si será capaz o no Donald Trump de aplicar su programa electoral. Algo que le está costando sangre, sudor y lágrimas. Así pues, Richard Turnill, Director Mundial de Estrategia de Inversión en BlackRock, considera que hay más rendimiento “en las acciones de los bancos estadounidenses que las tasas de interés”. Los tipos más altos tienden a ayudar “a la rentabilidad de los bancos y se correlacionan con un mejor comportamiento de los precios de las acciones”. Pero las acciones de los bancos estadounidenses se dispararon a finales de junio, incluso cuando el cambio esperado en la tipos de fondos federales se desplomó, como se muestra en el gráfico. ¿Por qué? El experto de BlackRock se centra en que los test de estrés anuales habrían limpiado los bancos más grandes de Estados Unidos, aumentando las esperanzas de los inversores para más recompras de acciones y pagos de dividendos. Trunill sostiene que le gustan los bancos bancos estadounidenses, “debido al crecimiento económico sostenido, la normalización de la política monetaria y las perspectivas de flexibilización normativa y por el incremento de los pagos de dividendos”. En lo que va de año, los bancos estadounidenses se han quedado rezagados respecto del mercado en su conjunto y de sus homólogos europeos. Sin embargo, esta tendencia estaría cambiando. Turnill comenta que las acciones del sector bancario estadounidense “subirán apoyadas por un crecimiento económico sostenido, la normalización de la política monetaria de la Fed y por las perspectivas de flexibilización normativa y el incremento de los pagos de dividendos”. De esta manera, los analistas esperan que las ganancias de los bancos estadounidenses “crezcan un 12,8% en 2018”, aunque BlackRock cree que esa cifra “se puede mejorar aún más”. Los bancos globales como grupo están cotizando a un mayor descuento con respecto a su promedio de 10 años, “con los bancos de los Estados Unidos con un descuento del 24%”, en comparación con el 5% para los bancos europeos. Los bancos de la zona euro luchan con tipos de interés negativos, “haciéndolos menos atractivos que sus homólogos estadounidenses”. Actualmente, termina, tienen “poco apetito por los bancos japoneses a pesar de sus atractivas valoraciones dado las políticas ampliamente acomodaticias del Banco de Japón”.