El polémico multimillonario Donald Trump, candidato republicano, como acostumbra, fue uno de los primero en pronunciarse acerca de este candente tema. Trump, disparó directamente sobre Apple, afirmando: "Vamos a presionar a Apple para iniciar la construcción de sus malditas computadoras y sus componentes en este país y no en otros países". En realidad, aunque Apple […]
Dirigentes Digital
| 16 mar 2016
El polémico multimillonario Donald Trump, candidato republicano, como acostumbra, fue uno de los primero en pronunciarse acerca de este candente tema. Trump, disparó directamente sobre Apple, afirmando: "Vamos a presionar a Apple para iniciar la construcción de sus malditas computadoras y sus componentes en este país y no en otros países". En realidad, aunque Apple hace la las investigaciones pertinentes y el diseño en su sede en Cupertino (California), fabrica la mayoría de sus iPhones, iPads y Macs a través de socios en países como China.
Estas palabras no sentaron muy bien a Tim Cook, consejero delegado de la compañía, que según ha informado el Huffington Post, acudió recientemente a una reunión secreta junto a otros líderes tecnológicos, donde debatieron la manera de detener el avance de Trump.
La cita habría tenido lugar en el American Enterprise Institute’s World Forum y junto a Cook habrían asistido otros grandes líderes, de algunas de las compañías tecnológicas más importantes del mundo, como Larry Page, cofundador de Google, Elon Musk, fundador de PayPal, Tesla y Space X o Sean Parker, fundador de Napster, Plaxo y Causes.
Otro de los problemas que tomaría fuerza si Trump llegase a mandar en la Casa Blanca, es el de los ‘cerebros’ extranjeros que trabajan estas empresas. La postura del multimillonario en cuanto a la inmigración y los visados para extranjeros es muy conservadora.
Donald Trump tampoco ha quedado al margen del debate nacional de las últimas semanas sobre la decisión de Apple de no colaborar con el FBI para desencriptar el iPhone de uno de los terroristas de San Bernardino. El candidato animó a hacer boicot a los productos de la compañía hasta que esta no cooperara con el FBI.
Trump señaló al respecto que el Estado Islámico "está usando la Red mejor que nosotros y eso que fue nuestra idea. Hay que ir a Silicon Valley y buscar con ellos la forma de que no lo puedan hacer". "No estoy hablando de cerrar Internet pero sí de cerrar aquellas partes de Internet donde el Estado Islámico tenga presencia", agregó el candidato republicano.
El resto de candidatos a la presidencia por el Partido Republicano, Ted Cruz y John Kasich, aunque de forma más comedida, coinciden con la opinión de Trump en que Apple debería cumplir la orden judicial y ofrecer a los encargados de investigar el atentado, la información necesaria a cerca del teléfono del terrorista.
Postura demócrata
Como era de esperar, la mayor parte de los políticos americanos están a favor del FBI en este caso concreto, lo que deja entrever su política de acción ante otros casos similares. Sin embargo, llevando la contraria a todos sus compañeros, Hillary Clinton ha decidido ponerse de lado de Apple en su cruzada contra el FBI. De esta forma, la candidata, más que una opinión, parece haber conformado una postura clara al respecto de las compañías de Internet y una apuesta política arriesgada, que puede salirle muy bien, o muy mal. "Obviamente Apple y las otras compañías tecnológicas están preocupadas por la situación", dijo Clinton. La política republicada añadió que tan inteligentes como son en estas empresas, "tienen que encontrar alguna manera de ayudar a obtener información en torno a los crímenes de forma específica".
El oponente de Clinton, Bernie Sanders también decidió no posicionarse entre Apple y el FBI declarando, "creo que podemos luchar contra el terrorismo sin socavar nuestros derechos constitucionales y nuestros derechos de privacidad".