Los mercados avanzan a ritmos casi descontrolados. En Estados Unidos llegamos ya al segundo mercado alcista más largo de la historia, tras casi nueve año de revalorizaciones acumuladas. Las ganancias han ido avanzando a medida que se aplicaba el programa de flexibilización cuantitativa por parte de la Reserva Federal, pero también ha proseguido con el […]
Dirigentes Digital
| 10 nov 2017
Los mercados avanzan a ritmos casi descontrolados. En Estados Unidos llegamos ya al segundo mercado alcista más largo de la historia, tras casi nueve año de revalorizaciones acumuladas. Las ganancias han ido avanzando a medida que se aplicaba el programa de flexibilización cuantitativa por parte de la Reserva Federal, pero también ha proseguido con el mayor tensionamiento monetario. No ha habido nadie ni nada que haya sido de frenar el empuje alcista de fondo. A la mayoría de este mercado bullish lo ha acompañado un sentimiento por parte de los inversores alcista. Sin embargo, la prolongación de su movimiento ha provocado que haya un cambio de postura por parte de los operadores, cada vez más recelosos de las alturas que ha cogido la bolsa estadounidense, con una consecución de máximos históricos tras máximos históricos desde hace algún tiempo. Tanto es así que el sentimiento alcista de los mercados ahora se encuentra por debajo del 50%, en torno al 40%. Según el equipo de análisis de Bespoke Investment, en tiempos normales, una lectura alcista del 40% “no sería un gran problema”, pero dado el estado de ánimo en los últimos años, “el 40% ahora se considera un logro”. En la encuesta elaborada por estos expertos durante la última semana de AAII, el sentimiento alcista “aumentó 1,7 puntos porcentuales el hasta 39,6%”. Eso representa un máximo de cinco semanas, pero también un récord de “147 semanas consecutivas en las que los alcistas no han logrado ser mayoría”. Mientras que el sentimiento alcista puede haber marcado un aumento, el sentimiento bajista “subió 5,1 puntos porcentuales a un máximo de siete semanas del 33,0%”. Es posible que el 33% no parezca mucho y sea más bajo que la lectura alcista del 39,6%, pero cuando se considera el hecho de que las acciones han estado alcanzando niveles récord en una base aparentemente diaria, “representa un saludable grado de escepticismo”. Con la expansión de la presencia de los alcistas y los bajistas en las últimas semanas, el posicionamiento de los inversores neutrales se ve bastante penalizado, cayendo 6,8 puntos porcentuales hasta el 27,3%. Esa fue la mayor disminución semanal desde agosto y es la lectura semanal más baja desde marzo.