Desde Ad&Law afirman que "los países se están dando cuenta del valor que supone para ellos estar a la vanguardia tecnológica por lo que cada vez están más interesados en captar startups de otras regiones para incubarlas, acelerarlas y convertirlas lo antes posible en scaleups y en imagen del país". Desde la compañía destacan los […]
Dirigentes Digital
| 27 ene 2016
Desde Ad&Law afirman que "los países se están dando cuenta del valor que supone para ellos estar a la vanguardia tecnológica por lo que cada vez están más interesados en captar startups de otras regiones para incubarlas, acelerarlas y convertirlas lo antes posible en scaleups y en imagen del país".
Desde la compañía destacan los siguientes países como "opciones que deben plantearse los emprendedores a la hora de iniciar su negocio" ya que, en algunas ocasiones, no hace falta que desarrollen su empresa por completo en estos países sino que "pueden desarrollar sólo una parte en el caso de que el país esté interesado estratégicamente en el sector".
Ejemplos de economías muy diferentes:
Luxemburgo. Si tienes una startup y contactas con alguna institución del país lo que sucederá es que ésta analizará en profundidad tu plan de negocio y en caso de interesarle, te garantizará fondos públicos al menos en la misma cantidad que tenga la empresa en fondos propios. Si hablamos de un proyecto de muy alta tecnología, además podrá llegar a garantizarte ayudas a fondo perdido en la medida que el proyecto lo necesite; por ejemplo, si lo que presentas es sólo una idea, te pueden dar 50.000€ para que desarrolles tu plan de negocio en Luxemburgo.
En el caso de que se trate de una startup a acelerar y convertir en scale up, suele ofrecer fondos públicos y toda una comunidad de inversores especializados que tienen conexiones con el resto de plazas financieras más importantes del mundo, como Londres, Silicon Valley o Singapur. Además, serán las propias instituciones públicas las que se encargarán de introducir tu empresa y producto a las principales empresas del país y a las multinacionales del sector que están en Luxemburgo, lo que favorece al máximo las ventas y el crecimiento de tu startup.
Brasil. Aunque es un país que se ve como un gran mercado tiene el impedimento de que es muy proteccionista. Por eso es vital hacerse local y para ello una de las mejores opciones para las startups es instalarse en parques tecnológicos. Éstos, aparte del espacio a precios muy ventajosos, funcionan realmente bien en cuanto a la captación de tecnología y, especialmente, a su promoción en el sector público ya que aseguran la comercialización de productos y ayudas a fondo perdido a proyectos en áreas estratégicas.
Para muchas empresas punteras es una oportunidad de darle una segunda vida a tecnologías que no han sido viables en España o no llegaron a desarrollar ventas suficientes. Agotadas las vías de financiación españolas, los emprendedores pueden intentar el relanzamiento en Brasil con nuevos apoyos y perspectivas. Se dan casos en que la empresa brasileña crece mucho mejor y más rápida que la española, volviéndose totalmente estratégica.
Canadá, Panamá, Rusia y Emiratos Árabes. La política a la hora de captar inversión extranjera de estos países pasa por dos vías: por un lado, comprometer fondos públicos en la misma cantidad que la inversión extranjera. Es decir, si la empresa española va a invertir 100, las instituciones públicas se comprometerán a otros 100 en diversos conceptos. Por otro lado, todos estos países tienen planes de deducciones fiscales, especialmente si la empresa se instala en determinadas zonas, que eximen en la mayoría de los casos del impuesto de sociedades durante varios años, se subvencionan las cotizaciones sociales de todos los empleados (no solamente I+D), etc.
No obstante, estas ventajas pueden no ser un gran incentivo para emprendedores y startups dado que su volumen de inversión inicial es muy limitado, pero sí puede serlo para cualquier pyme con un plan de inversión claro en estos países, que además pueden intentar buscar apoyo adicional para estos proyectos de inversión de instituciones públicas.