Diez millones. Esa es la cantidad de contratos laborales que se han cerrado a través de Infojobs. La plataforma web fundada en 1998 sopla las velas por todo lo alto. Solo en España trabajan con 70.000 empresas que abarcan desde pequeñas y medianas empresas a multinacionales, haciendo posible la incorporación de un trabajador en menos […]
Dirigentes Digital
| 24 feb 2018
Diez millones. Esa es la cantidad de contratos laborales que se han cerrado a través de Infojobs. La plataforma web fundada en 1998 sopla las velas por todo lo alto. Solo en España trabajan con 70.000 empresas que abarcan desde pequeñas y medianas empresas a multinacionales, haciendo posible la incorporación de un trabajador en menos de siete días. Y todo ello gracias a la innovación, un factor que “forma parte del ADN” de este equipo, tal y como confiesa en su entrevista a DIRIGENTES la directora general de la compañía, Dominique Cerri. Infojobs nace el mismo año que Google. ¿Cómo ha cambiado en estas dos décadas? En este tiempo, los procesos se han simplificado mucho y estamos en múltiples dispositivos. Contamos con herramientas muy potentes para pymes, que no disponen de un departamento de Recursos Humanos y les facilitamos la tecnología para hacer la búsqueda de trabajo lo más sencilla posible y con la máxima rapidez. La velocidad es absolutamente clave en las empresas. Pero también colaboramos con grandes compañías y multinacionales que gestionan muchas candidaturas con el objetivo de ayudarles a gestionar ese talento de manera muy rápida y sofisticada a la vez. Más de 500.000 compañías españolas nos han utilizado en los últimos 20 años solo en España, lo que se traduce en 10 millones de contratos laborales, el equivalente a la mitad de la población activa en dicho país. ¿Cómo ha cambiado el mercado laboral en todo este tiempo? Diría que se puede dividir en cuatro fases. La primera fue de crecimiento donde solamente se inscribían perfiles tecnológicos. Sin embargo, en 2001 explota la burbuja de Internet y desaparecen el 90% de las empresas. Afortunadamente, nosotros sobrevivimos y nos hicimos más fuertes. Se abrió una nueva etapa donde comenzamos a representar a todos los perfiles. Hasta que llegó la crisis económica y se dejaron de publicar ofertas. Fueron cinco años muy duros para todo el país. En el período 2013-2014 volvimos a innovar y a marcar tendencia. Ahí fue cuando comenzamos con esta revolución móvil que nos ha llevado hasta donde estamos ahora. Con la ayuda del dispositivo móvil acudimos a esta democratización que multiplicó por tres el número de candidatos que nos utilizan porque es más rápido, es más fácil y al final es más barato. Somos la única plataforma que garantiza en una semana tener trabajando a esa persona en la empresa. De manera paralela también han surgido otras plataformas de reclutamiento de empleo, ¿qué valor diferencial aporta Infojobs? A raíz de la crisis económica están surgiendo muchas ideas que ofrecen búsquedas de empleo a través de aplicaciones móviles. Pero las empresas no tienen ni tiempo ni dinero para publicar en seis o siete plataformas diferentes. Por ello, usan aquella que saben que es eficaz al 100%. Estamos contentos de ver que hay nuevas ideas que funcionan en el mercado tanto en España como en otros países porque nos reta y nos permite también coger ideas, innovar y seguir marcando tendencia para reinventarnos constantemente. Durante el mes de enero el número de vacantes con carácter indefinido se ha incrementado un 50% internual hasta representar una cuarta parte de todas las ofertas, ¿cuál es el síntoma más evidente de este dato? Infojobs es la representación de lo que está pasando en España. El país está sufriendo las consecuencias de la crisis económica y después de una recuperación suele venir la parte de la precariedad. Pero aún queda recorrido para tener trabajo fijo e indefinido y con salarios más altos. Se pueden hacer cosas en muchos niveles, empezando por el colegio y las universidades para que formen de la mejor manera posible a los jóvenes para el trabajo del futuro. Es muy importante pensar donde habrá trabajos dentro de un par de años y empezar a impartir a los alumnos aquellas competencias que les ayudarán. Por otro lado, se necesita que las empresas formen a sus empleados. El Estado también tiene que tener un rol muy importante de cara a fomentar lo máximo posible el mundo de las tecnologías, así como su desarrollo e innovación. El mercado de trabajo está evolucionando muy rápido. ¿Qué sectores se espera que tengan más tirón en los próximos años? El mundo cambia tan rápido que es posible que dentro de tres años haya segmentos inexistentes a día de hoy. El sector de la tecnología y de los servicios está creciendo mucho. Por ello hay que estar preparados y trabajar en las ‘soft skills’. Tanto las habilidades como las cualidades son importantes en el mercado laboral. Los reclutadores valoran la manera de trabajar con esa persona, además de ciertas actitudes como el compañerismo, la generosidad e incluso cuáles son los valores que comparte. ¿Podría darse el caso de que las plataformas como Infojobs eliminarán el departamento de RR.HH? Nosotros somos una herramienta al servicio de los departamentos de RR.HH y éstos nunca podrán ser reemplazados por un ser humano. El responsable de esta área es la dirección de la empresa. Infojobs es la plataforma de las personas y de los directivos, pero también de aquellas pymes que están en fase de crecimiento y necesita crecer. ¿Es evidente la brecha salarial? En las ofertas que publicamos está prohibido especificar el género para no tener discriminación. En las comparaciones salariales por género que realizamos hemos detectado que para un mismo puesto todavía hay un 25% de diferencia entre hombres y mujeres. Eso es una mala noticia porque vemos que hay mucho recorrido por hacer en esta materia. En las encuestas detectamos que las que han podido cambiar de trabajo gracias a Infojobs han obtenido una mejora profesional y de salario. No está equiparado, pero ya hay una mejora. Por tanto, las empresas tienen que trabajarlo, analizarlo y tener conciencia del problema para poder reducir este gap. A nivel global, las estructuras organizativas de las empresas están evolucionando hacia un modelo menos jerarquizado, ¿se está trasladando esta tendencia al modelo español? El cambio hacia jerarquías más planas está llegando poco a poco. Los profesionales no quieren jefes, quieren líderes que les inspiren. Y viceversa, los jefes ya no buscan empleadores ejecutores, sino gente que piense, que les reten a que sean mejores que ellos en muchos sentidos y donde cada uno es responsable de su grano de arena. En España, las empresas más exitosas van en esa dirección, El oro de una compañía son sus empleados. Y aquellas que no sepan enamorar o atraer este talento no serán exitosas ni competitivas. Precisamente uno de los principales retos que enfrentan las corporaciones es la retención de talento y la motivación de sus empleados, ¿cómo se debe gestionar? No a todos se les motiva de la misma manera, ya que no todos tienen las mismas necesidades. En primera instancia se debe analizar qué es lo que necesitan y después motivarles. A los jóvenes por ejemplo no les incentiva una corbata. Buscan compañerismo o futbolín, mientras que las personas con hijos abogan por conciliación familiar. Hay que escuchar al talento y no es nada complicado, solo hay que detectar lo que necesitan. Un informe del FMI calcula que entre 2015 y 2020 se destruirán alrededor de siete millones de puestos de trabajo a causa de la Industria 4.0, ¿se aprecia esta tendencia? No es nada nuevo. Es algo que se aprecia desde la primera revolución industrial. En el siglo XVIII había un trabajo manual muy fuerte y muy duro que ha ido desapareciendo, pero se han ido creando otros más interesantes que las máquinas no pueden hacer. En los últimos 150 años la economía mundial ha crecido de manera paulatina y surgirán nuevos puestos de trabajo. Hay personas que tienen miedo, pero estoy muy feliz. Hace 100 años yo estaría trabajando en una fábrica haciendo el mismo gesto todo el día, pero hoy tengo un cargo maravilloso donde puedo asesorar, comunicar y hacer cosas que una máquina nunca podrá hacer.