La pobreza en Argentina es un asunto de datos. El alcance de la gravedad de la situación es uno u otro en función de quién la mida, tal y como se ha reflejado esta semana. La falta de datos oficiales precisos y recientes sobre el nivel de pobreza en el país se han hecho evidentes […]
Dirigentes Digital
| 15 jul 2015
La pobreza en Argentina es un asunto de datos. El alcance de la gravedad de la situación es uno u otro en función de quién la mida, tal y como se ha reflejado esta semana. La falta de datos oficiales precisos y recientes sobre el nivel de pobreza en el país se han hecho evidentes cuando el Observatorio Social de la Universidad Católica Argentina (UCA) ha señalado que la pobreza en Argentina durante el año 2014 afectó al 28,7% de la población.
Esto contrasta con los datos ofrecidos por el Gobierno de Cristina Fernández que afirmó que el número de pobre estaba por debajo del 5%. Por ello, el Arzobispo Monseñor Víctor Manuel Fernández, Rector de la Pontificia Universidad Católica Argentina, asegura que "sabemos que los datos que ofrecemos significan un cuestionamiento a cualquier gobierno, nacional o local, presente o futuro, de cualquier signo político, porque su objetivo es poner de manifiesto y reclamar una ‘deuda social".
Pobreza estructural
El informe evidencia que "al menos 1 de cada 10 hogares de los principales centros urbanos del país presenta déficits en alguno de los indicadores de pobreza estructural, revelando dificultades para cubrir las necesidades básicas de alimentación y acceder a los recursos estructurales de bienestar".
También se pone de manifiesto que la mayoría de hogares argentino no capacidad de ahorro. En 2014, "alrededor de 4 de cada 10 hogares consideraban insuficientes sus ingresos para satisfacer sus necesidades y patrones habituales de consumo. Asimismo, solo 1 de cada 10 declaró haber tenido capacidad de ahorro". Tras un fortalecimiento en 2011, dicha capacidad de ahorro se redujo paulatinamente durante el periodo 2011-2014, con un descenso abrupto en el último año.
Deuda social
Para Agustín Salvia, investigador jefe del Programa Observatorio de la Deuda Social Argentina, "la ausencia de un reconocimiento oficial de estos problemas y la deliberada falta de información pública al respecto, hacen particularmente necesario continuar estudiando las ‘deudas sociales’ desde una perspectiva integradora del desarrollo humano y social".