A pesar de las caídas del jueves, la semana ha sido bastante positiva para las Bolsas. Tal y como recuerda Daniel Pingarrón, analista de IG Markets, "los principales índices occidentales han recuperado entre un 3% y un 5% respecto al cierre de la semana pasada, siendo ésta la mejor semana desde mediados de noviembre del […]
Dirigentes Digital
| 19 feb 2016
A pesar de las caídas del jueves, la semana ha sido bastante positiva para las Bolsas. Tal y como recuerda Daniel Pingarrón, analista de IG Markets, "los principales índices occidentales han recuperado entre un 3% y un 5% respecto al cierre de la semana pasada, siendo ésta la mejor semana desde mediados de noviembre del año pasado". El avance sobre los mínimos de la semana pasada se acerca al 8% en la mayoría de casos."No es casualidad que esta mejoría de las Bolsas coincida con dos circunstancias: el petróleo también sube esta semana cerca de un 4% y el sector bancario europeo sube de media un 5%", indica el experto.
Pero cuidado. El rebote no significa, a su juicio, un cambio de tendencia. Mucho menos teniendo en cuenta el análisis técnico. "El gráfico semanal en los índices bursátiles no acaba de presentar un giro lo suficientemente intenso. Las velas de Heiken Ashi, por ejemplo, siguen siendo bajistas en semanas", indica el experto, anticipando que "vamos a tener que esperar a la próxima semana para poder confirmar si estamos en efecto en un rebote de gran intensidad que ya habría comenzado, o si ha sido una salida de la sobreventa fallida, como ya ocurrió en los últimos días de enero".
Los expertos recomiendan prudencia. En una nota remitida a clientes, el gigante Capital Group asegura esta semana que "las turbulencias persistirán, en un entorno de tasas por debajo de cero en el que la deflación supone una amenaza real para Japón y Europa". A su juicio, el riesgo de una recesión en EEUU también ha aumentado, "lo que significa que la Reserva Federal probablemente no aumente los costos de endeudamiento en 2016".
De hecho, esta es una de las principales razones por las que las gestoras siguen pidiendo calma: no ven claro que los bancos centrales vayan a tener éxito en la prevención de una fuerte desaceleración económica. Según los expertos, "estas acciones pueden causar efectos secundarios inesperados".
Desde Capital Group recuerdan cómo las economías de Dinamarca, Suecia y Suiza se han visto favorecidas por una política monetaria de tasas negativas. "Sin embargo, la adopción de esta medida podría tener consecuencias no deseadas, activado el acaparamiento de efectivo entre los individuos para socavar el modelo de negocio tradicional de la banca", indican desde Capital Group.
Otro de los grandes de la industria de gestión de activos, Hamish Douglass del Magellan Global Equity Fund, también mantiene su cartera en máximos de liquidez. Y lejos de tener perspectivas de poner a trabajar ese dinero, prefiere apostar por la prudencia. El fondo, que en los últimos cinco años ha superado en términos de rentabilidad al 99% de sus pares, mantiene los niveles de efectivo en cartera rondando el 16%, igualando niveles de 2009.
Para el experto, el principal problema no es el riesgo de desaceleración económica, ni espera un aterrizaje forzoso en China. De hecho, su predicción es positiva para la economía global. En una entrevista concedida a Bloomberg, el gestor insiste en que "nuestra tesis central es que China no se derrumbe y que el yuan no se colapsará, mientras que la recuperación económica se mantendrá en EEUU en los próximos años".
A su juicio, el verdadero problema está en las valoraciones. "Si la economía se recupera y la Fed eleva gradualmente las tasas de interés, algunas de las acciones más atractivas se volverán caras".
Desde Link Securities recuerdan que, en este entorno, será interesante comprobar "hasta qué punto la reciente reacción experimentada por los mercados de valores occidentales ha estado basada en una mejora del sentimiento por parte de los inversores o ha consistido únicamente en un rebote técnico, propiciado por el elevado nivel de sobreventa de muchos valores y por el cierre precipitado de posiciones cortas". En su opinión, si el precio del crudo logra estabilizarse también lo harán las bolsas, al menos hasta las decisivas reuniones que celebrarán tanto el BCE como la Fed en el mes de marzo. Pero, ¿serán ambos encuentros factores de estabilización, o más bien de una nueva oleada de volatilidad en el mercado?