Daniel García-Pita Pemán, vicepresidente de Indra, ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) la compra de 967 acciones, a un precio unitario de 11,68 euros. Controla un 0,048% del capital. Por su parte, Norges Bank ha modificado su participación hasta el 2,856% (2,035% y un 0,821% adicional vía instrumentos financieros), desde […]
Dirigentes Digital
| 08 mar 2017
Daniel García-Pita Pemán, vicepresidente de Indra, ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) la compra de 967 acciones, a un precio unitario de 11,68 euros. Controla un 0,048% del capital. Por su parte, Norges Bank ha modificado su participación hasta el 2,856% (2,035% y un 0,821% adicional vía instrumentos financieros), desde el 3,257% (2,436% y 0,821%, respectivamente) previo. A principios de febrero, Indra informaba al regulador de una autocartera del 0,213%, por encima del 0,206% de diciembre de 2016. Indra cerró 2016 con un beneficio neto de 70 millones de euros, frente a las pérdidas de 641 millones que se registraron en 2015 por saneamientos extraordinarios. Por su parte, el Ebitda creció hasta los 229 millones de euros, desde los 131 millones alcanzados en 2015, con una expansión del margen Ebitda en el año hasta el 8,5% frente al 4,6% previo. El margen Ebit alcanzó el 6,0%, mejorando el 1,6% anterior. Indra “destaca significativamente la generación de caja, que ascendió hasta los 184 millones de euros, por la mejora operativa y el circulante. El free cash flow del cuarto trimestre fue los 140 millones”. Mientras, los ingresos descendieron un 3%, hasta los 2.709 millones de euros. América presentó crecimiento en el cuarto trimestre (del 1%) frente al descenso del 20% en los nueve primeros meses de 2016. La contratación creció un 6% en moneda local (un 4% en términos reportados). “En el cuarto trimestre (repunte del 4% en moneda local y del 5% reportado), se consolidó la senda de recuperación iniciada en trimestres anteriores, especialmente en el ámbito de TI, mientras que T&D se desaceleró por el impacto de la fuerte contratación registrada en el cuarto trimestre de 2015, asociado a proyectos específicos con el Ministerio de Defensa en España”, apunta la compañía. Finalmente, la deuda neta de Indra se redujo un 25% con respecto a diciembre de 2015, hasta los 523 millones de euros.