Juan Osuna, hombre de confianza de Juan Miguel Villar Mir, tomó los mandos de OHL México la semana pasada en sustitución de José Andrés de Oteyza, que apareció recientemente en las grabaciones telefónicas que destaparon el presunto caso de comisiones ilegales a cambio de concesiones en México. El dirigente, que es consejero delegado de la […]
Dirigentes Digital
| 06 may 2016
Juan Osuna, hombre de confianza de Juan Miguel Villar Mir, tomó los mandos de OHL México la semana pasada en sustitución de José Andrés de Oteyza, que apareció recientemente en las grabaciones telefónicas que destaparon el presunto caso de comisiones ilegales a cambio de concesiones en México.
El dirigente, que es consejero delegado de la división de concesiones del grupo, era vicepresidente de la filial mexicana. Su nombramiento está enmarcado en el objetivo de abrir una nueva etapa de la compañía en el país para dejar atrás la pesadilla que persigue a OHL en México.
El relevo de la cúpula directiva ha quedado empañado por una nueva denuncia de Infraiber, la consultora que había sido encargada de contabilizar el tráfico de las autopistas que gestiona la compañía en México. El denunciante llevó las cuentas de OHL México desde 2010 ante la Fiscalía mexicana de Delitos Financieros al considerar que se habían manipulado al contabilizarse las concesiones de las autopistas de Circuito Exterior Mexiquense y Viaducto Bicentenario como rentabilidad garantizada.
Infraiber ha ampliado la denuncia inicial a José María Cuvillo, consejero de OHL, por aprobar y difundir al público los estados financieros consolidados de OHL México en 2013 y 2014, y a Juan Osuna, Sergio Hidalgo, Jesús Campos, Gabriel Núñez y Gerardo Fernández por formar parte del Consejo de Administración de Concesionaria OHL que dio por buena la anotación contable de las concesiones.
La discrepancia entre las dos empresas surge a la hora de calcular la rentabilidad garantizada de las concesiones del Viaducto Bicentenario y Circuito Mexiquense, que fue denuncia por Infraiber ante la CNMV mexicana, la cual sancionó a OHL México 3,6 millones de euros, aunque indicó que no se había producido ni fraude ni dolo, tan solo un error en la aplicación contable.
El conflicto se remonta a 2013 cuando a Infraiber se le retiró el contrato para medir el tráfico de las autopistas mexicanas. La firma emprendió un enfrentamiento contra OHL México tras meses después de que se le prorrogara la concesión del Circuito Exterior Mexiquense y no permitiese a la tecnológica instalar sus controles. Hasta hoy la disputa ha dejado denuncias entre las dos empresas y el destape de grabaciones telefónicas entre dirigentes de la constructora española y miembros de la Administración mexicana, en una presunta trama de corrupción.