La revisión de las cuentas del Banco Popular fue bastante negativo para el valor. En primer lugar, sigue generando mucha incertidumbre en cuanto a la situación real de su balance, con enorme peso de activos tóxicos. Las estimaciones de déficit de capital son de entre 3.000 y 4.000 millones para lograr una relación CET1 en […]
Dirigentes Digital
| 12 abr 2017
La revisión de las cuentas del Banco Popular fue bastante negativo para el valor. En primer lugar, sigue generando mucha incertidumbre en cuanto a la situación real de su balance, con enorme peso de activos tóxicos. Las estimaciones de déficit de capital son de entre 3.000 y 4.000 millones para lograr una relación CET1 en torno al 11%. Incluso con la venta de activos, un aumento de capital parece inevitable, aunque el tamaño sigue siendo incierto por ahora. Destaca una cartera de 36.000 millones en activos tóxicos (cerca del 25% dos activos totales por encima de la media de sus competidores españoles) y apenas con un 44% de ratio de cobertura, igualmente por debajo de la media del resto de bancos españoles. De acuerdo con algunos analistas, para que el banco logre una tasa de cobertura en torno al 60%, necesitaría un aumento de capital de alrededor de 6.000 millones de euros, un escenario que considero poco realista por su magnitud. Por otra parte, se abre el riesgo de litigios por parte de todos aquellos inversores que suscribieron la ampliación de capital de mayo del 2016, dado que la gente que puso dinero lo puso en base a unas cuentas que no eran reales, y por tanto, puede haber demandas igual que con la salida a Bolsa de Bankia. La salida de Pedro Larena nos parece sensata, ya que tiene que haber responsabilidades ante una situación así. Lo normal es que Emilio Saracho ponga a gente de su confianza en puestos clave del banco. De acuerdo con la prensa, planea mejorar los ratios de capital del banco a través de la venta de las filiales extranjeras de negocios no estratégicos y participaciones financieras. Además, el presidente ve una posible fusión con otro banco como una alternativa para mejorar la situación de capital del banco o cualquier emisión de CoCos. Banco Popular registró una pérdida de 3.500 millones en 2016, con las consecuencias de la caída del sector inmobiliario que siguen afectando a su balance. La capitalización de mercado actual del banco está situado en unos 2.670 millones, acumulando un descenso del 30% en el año, el más alto entre sus homólogos europeos. Marisa Cabrita es analista de Orey Financial.