La historia de corrupción que rodea a la petrolera estatal brasileña suma un nuevo capítulo. Este martes, el ex responsable del departamento de servicios de la compañía estatal, Pedro Barusco, daba explicaciones sobre la trama en el Parlamento de Brasil. Barusco ha señalado que el Partido de los Trabajadores (PT), que gobierna ahora el país […]
Dirigentes Digital
| 11 mar 2015
La historia de corrupción que rodea a la petrolera estatal brasileña suma un nuevo capítulo. Este martes, el ex responsable del departamento de servicios de la compañía estatal, Pedro Barusco, daba explicaciones sobre la trama en el Parlamento de Brasil.
Barusco ha señalado que el Partido de los Trabajadores (PT), que gobierna ahora el país bajo el mandato de Dilma Rousseff, pudo recibir hasta 200 millones de dólares en comisiones por los contratos que la petrolera realizaba.
En su declaración ante la Fiscalía, Barusco también apuntó directamente a dos figuras políticas: el tesorero del Partido de los Trabajadores (PT) João Vaccari, y Renato Duque, encargado del departamento de servicios. Según el ex dirigente de Petrobras, ambos se beneficiaron de las comisiones.
"Una parte para mí, una parte para ellos"
Con la frase, "una parte para mí, una parte para ellos", Barusco definía el reparto de comisiones por las operaciones que gestionaba con Petrobras. Por otra parte, el directivo prometió devolver 97 millones de dólares como moneda de cambio para evitar ser encarcelado. En cambio, Barusco ha negado saber quién era el cabecilla de la operación.
Las estimaciones sobre la trama apuntan a que se llegaron a desviar unos 8.000 millones de euros. Aunque no se ha conocido hasta 2014, las investigaciones comenzaron en julio de 2013 y han destapado una red de lavado de dinero en la que estaban involucrados varios dirigentes de la compañía. Tras la detención del exdirector de Abastecimiento de Petrobras, Roberto Costa, la investigación apuntó a varios constructores del país y salpicó a la política.
Para intentar frenar el deterioro de sus cuentas y de su imagen, Petrobras contrató en octubre dos bufetes de abogados mientras la presidenta de la compañía presentaba su dimisión. "Con la adopción de estas medidas preventivas, Petrobras busca proteger a la compañía y sus socios de daños financieros de difícil reparación y del daño a su imagen", según señalaba la compañía.