Boom del petróleo en EEUU El aumento de la perforación del petróleo con la recuperación de su precio ha sido un importante motor de la economía estadounidense, incluyendo repunte de la inversión. De momento la curva los precios de futuros están por debajo de los actuales, es decir el mercado espera una bajada los próximos meses. […]
Dirigentes Digital
| 09 ene 2018
Boom del petróleo en EEUU
El aumento de la perforación del petróleo con la recuperación de su precio ha sido un importante motor de la economía estadounidense, incluyendo repunte de la inversión. De momento la curva los precios de futuros están por debajo de los actuales, es decir el mercado espera una bajada los próximos meses. Pero si los precios empiezan a reflejar la demanda global más fuerte la inversión puede repuntar. Un aumento en diez dólares del barril WTI puede aumentar el PIB de EEUU un 0,15% en 2018, aunque tamsuponer un golpe para el consumo privado, más difuso, que podría empezar a sentirse en 2019.
Línea dura de la Reserva Federal
Yellen dejará la presidencia de la Reserva Federal en favor de Jerome Powell pronto en 2018, quien previsiblemente mantenga una línea de normalización gradual de política monetaria. Pero hay incertidumbre respecto a vacantes –incluyendo la de vicepresidente- y Trump puede situar a de línea dura. Existe el riesgo de que la muy benigna normalización que descuenta el mercado pueda cuestionarse y se den condiciones financieras más restrictivas, afectando crecimiento de EEUU.
Deuda de Chicago
Los problemas de deuda de Puerto Rico han aumentado este año, sobre todo tras un huracán severo. Pero además muchas ciudades y Estados de EEUU tienen dificultades presupuestarias, especialmente debido al aumento de los costes por pensiones. Illinois y la ciudad de Chicago particularmente, además de por bajo crecimiento lenta y desfavorable precio del petróleo, así como salida de población. El volumen total de deuda municipal viva era ya de 3,6 billones de dólares el tercer trimestre. Un ajuste de las condiciones de deuda puede llevar a una desaceleración en la inversión en infraestructura local.
Gran demanda en la euro zona
Pronosticamos un crecimiento real del PIB en la euro zona del 2,3% en 2017 y 2018. Un renacimiento en países de mayor brecha de inversión respecto a antes de la crisis puede aumentarlo por encima del 3% de manera sostenida. La zona euro sólo ha registrado crecimiento similar con sectores en burbuja, 3,2% en 2006-07 (boom inmobiliario español) y 3,1% en 1997-2000 (burbuja puntocom). Pero esta vez la perspectiva de estabilidad macroeconómica y progreso institucional (incluyendo una Unión Europea más fuerte, con mayor unión monetaria) puede desatar gran demanda potencial, acumulada con la crisis. El sólido crecimiento global puede además ayudar impulsando el comercio neto a medida que se recupera competitividad de precios.
La francesa Rey por Draghi
El BCE se ha comprometido a no aumentar los tipos de interés hasta “bien más allá” del final de su compra neta de activos, aunque prominentes funcionarios han comenzado a desafiar la secuencia de salida ante un fuerte crecimiento y primeros signos de reactivación de la inflación. Al respecto el BCE, si gestiona correctamente su comunicación, puede promover un aumento de las rentabilidades a vencimiento de la deuda manteniendo los diferenciales respecto al bono alemán y apoyando con ello los beneficios de los bancos. Puede empezar con mayor flexibilidad de previsiones, previo a un alza en la tasa de depósitos bancarios desde el actual menos 0,4% a una menos negativa en 2018. Mientras puede mantener el tipo básico en 0%, dejando entrever una primera subida en 2019. Mientras vicepresidente y presidente terminarán sus mandatos en mayo de 2018 y octubre de 2019. Es poco probable que el sucesor de Draghi se conozca antes de principios de 2019, aunque la “gran negociación” empezará antes, sobre todo porque Alemania quiere posiciones clave. Si no hay acuerdo nuestra alternativa favorita es la francesa Hélène Rey, profesora de economía en la London Business School y altamente respetada por su trabajo en flujos financieros y estabilidad macroeconómica. Sería positivo, pues cualquier presidente del BCE no alemán se percibiría menos duro, al menos inicialmente.
El gobierno más izquierdista en Reino Unido desde la década de 1970.
El gobierno conservador de Teresa May parece débil y sin timón, con el laborista Jeremy Corbyn al acecho. Una alianza Corbyn con los nacionalistas escoceses, demócratas liberales y verdes le daría a las llaves de Downing Street en el gobierno más izquierdista desde la década de 1970. Además los euroescépticos conservadores están más centrados que nunca en un Brexit duro. Ahora bien, con las negociaciones con Bruselas sobre un nuevo acuerdo comercial la segunda mitad de 2018 y empresas inglesas en pánico May puede mostrarse dispuesta a un período de transición considerablemente mayor que dos años, durante los que el país quedaría sujeto a las reglas del mercado único.
Ajuste de política monetaria en Suiza
Los años pasados las empresas suizas han tratado de compensar la fuerza del franco ajustando precios. Por efecto base las fluctuaciones de la energía pueden llevar a inflación más baja a corto plazo, aunque esperamos aumente en 2018. Sin embargo tras el rechazo de la reforma de las pensiones los tipos de IVA se reducirán al 7,7% y 3,7% a partir del 1 de enero de 2018. La reducción afectará a bienes de consumo, presionando la inflación a la baja. Además los alquileres (18% del IPC) están bajo presión. En cambio los precios de mercancías importadas pueden aumentar con la debilidad del franco. Si la inflación sorprende significativamente a la baja puede obligar al Banco Nacional de Suiza a mantener, si no aumentar, su ya acomodaticia política monetaria.
Cambio de política monetaria en Japón
En Japón crecimiento interno y externo aumentan pero la inflación ha sido una gran decepción. Casi cinco años después de que el Banco de Japón comenzara una flexibilización monetaria sin precedentes todavía sigue tercamente por debajo de 1%. Sin embargo las presiones aumentan con las limitaciones de capacidad, sobre todo porque la tasa de desempleo ha bajado al 2,8%, menor desde mediados de 1994 y es cada vez más difícil contratar trabajadores, especialmente en servicios. Si la inflación sorprende al alza puede obligar a reconsiderar sus políticas monetarias, especialmente porque los responsables se muestran cada vez más preocupados respecto a efectos secundarios negativos. El Banco de Japón sorprender ajustando la curva de rentabilidades a vencimiento de la deuda del gobierno, aumentando su objetivo en 2018 o anclando la rentabilidad a cinco años en lugar de los diez actuales.
Alza de tipos de interés en China
En 2017, a pesar del des-apalancamiento financiero y normas ambientales más estrictas, el crecimiento en China ha sido fuerte, con sólidas exportaciones y consumo interno. La inversión en activos fijos ha compensado la desaceleración en infraestructuras y propiedad. Las nuevas industrias como servicios de Internet, vehículos eléctricos y biotecnología muestran fuerte crecimiento, en contraste con el declive de la fabricación tradicional como juguetes y calzado. Pero la deuda sobre PIB exhibe sostenido descenso por primera vez desde la crisis financiera global, gracias al fuerte aumento del PIB nominal y menor ritmo de acumulación de deuda. Una mayor inflación puede obligar al Banco Popular de China a un alza de tipos de interés. Con al aumento de diferenciales de rentabilidad a vencimiento de su deuda con la de EEUU y una reversión de flujos de capitales el renminbi puede apreciarse 5% o más respecto al dólar en 2018.
Amenazas geopolíticas en Asia
Además de las tensiones respecto a Corea del Norte pueden surgir otras amenazas en Asia. Está cada vez más claro que China no es capaz de ejercer una influencia significativa sobre el régimen de Kim y contener sus ambiciones nucleares. Para evitar que EEUU controle toda la península de Corea tras un colapso desordenado del régimen de Kim, puede tomar medidas proactivas, como unir fuerzas con Rusia, EEUU y Corea del Sur para invadir Corea del Norte.
Aparte hay una disputa territorial entre Japón y China sobre las islas de Senkaku (Diaoyu). La reciente propuesta de alcalde de Ishigaki de Japón de cambiar el nombre añadiendo “Senkaku” puede presagiar una escalada. El mandato de Abe probablemente permita movimientos más audaces tras la enmienda a su constitución pacifista. A ello se añade la competencia por dominar el mar meridional entre EEUU y China. La marina de EEUU ha movido menos tres patrullas en libre navegación desde que Trump asumió la administración. China normalmente responde enviando a identificar y advertir a los buques, mientras continúa su militarización con islas artificiales.
A ello se añade las tensiones entre India y China en una pequeña región, Doklam (Donglang) cerca del Himalaya, donde ambos países han reforzado presencia militar. El último gran conflicto entre los dos fue en 1962, con miles de muertos o heridos, sobre todo del lado indio.