Un 0,25% es lo que ha subido la Reserva Federal los tipos de interés federales, del 1,5% al 1,75%. Además ha aumentado el pronóstico del PIB del 2,5% al 2,7%. “Tomamos una decisión en esta reunión y es la de aumentar la tasa de fondos federales en 25 puntos básicos”, dijo el nuevo presidente del banco central estadounidense Jerome Powell a los periodistas en su primera rueda de prensa tras la reunión de dos días del Comité Federal del Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés). Estos tipos están estrechamente vinculados a las tasas de las hipotecas, tarjetas de crédito y otros préstamos que afectan a los consumidores, y que generalmente aumentan tan pronto como la Fed se mueve. PIB e inflación “La perspectiva económica se ha fortalecido en los últimos meses con un desempleo muy bajo y salarios que aumentan”, decía Powell. Es por ello que la Reserva Federal ha elevado su pronóstico para el crecimiento del PIB. Ahora espera un crecimiento económico más rápido este año, de un 2,7% frente al pronóstico del 2,5% de diciembre antes de que los recortes de impuestos de Trump. Además, han aumentado las expectativas para 2019 del 2,1% al 2,4%. El Comité Federal del Mercado Abierto señaló que el gasto de los hogares y la inversión fija de los negocios “se han moderado a partir de sus fuertes lecturas del cuarto trimestre”. Las expectativas de inflación han cambiado poco. La previsión para 2018 sigue siendo del 1,9% tanto para la inflación subyacente como para la inflación general (excluye los precios de los alimentos y la energía). Para 2019, el pronóstico de gasto de consumo personal básico subió a 2,1% desde el 2% mientras que el titular se mantuvo en el 2%. Powell desalentó los temores de que la inflación podría despegar si la tasa de desempleo sigue siendo baja. La Fed ahora proyecta que la tasa de desempleo caerá al 3.8% este año. Ahora se encuentra en 4.1%. 2 subidas más este año Este es el sexto aumento de tipos de interés desde diciembre de 2015, cuando la Fed comenzó a ajustar la política monetaria por primera vez después de la crisis financiera. Aún así, los tipos siguen siendo extremadamente bajos según los estándares históricos. La brillante perspectiva económica del país había elevado las expectativas de los inversores de que la Fed aceleraría los “aumentos tarifarios” planeados para evitar que la economía se sobrecaliente. Algunos apostaban por 4 subidas este año, pero el banco central estadounidense se mantuvo firme en sus planes para tres alzas en 2018, reforzando el mensaje de que planea mantener aumentos graduales. Aunque dijo que los pronósticos económicos pueden cambiar, sobre todo después del recorte de impuestos de Donald Trump y de los 300.000 millones en gastos gubernamentales adicionales. Es por eso que la mitad de los miembros del FOMC ahora creen que será necesaria una cuarta subida si la economía sigue funcionando tan bien como esperan. El trabajo de Powell es mantener la economía en movimiento sin comenzar una recesión durante su mandato de cuatro años, un riesgo que el presidente de la Fed dijo que no considera inminente. Reacciones y aranceles La decisión unánime del alza de los tipos de interés le indica a Wall Street que Jerome Powell, por el momento, sigue la línea de su predecesora Janet Yellen para un aumento gradual de las tasas. Aunque los analistas esperaban esta subida, la noticia generó una alza en los principales índices bursátiles. Pero las palabras de Powell sobre algunas previsiones económicas para el país, generaron un retroceso en el parqué neoyorquino y al cierre, su principal indicador, el Dow Jones, se dejaba un 0,18%. Jerome Powell, preguntado acerca de los aranceles sobre el acero y el aluminio del presidente Trump, dijo que la Fed no creía que los cambios en la política comercial “deberían tener ningún efecto sobre las perspectivas actuales”. Pero los líderes empresariales han expresado su preocupación a los funcionarios de la Fed. El presidente de la Reserva Federal dijo que las actuales disputas comerciales son ahora “un riesgo más prominente para las perspectivas” que antes. Se abstuvo de responder preguntas sobre una posible guerra comercial entre Estados Unidos y China.