Mariano Rajoy ha impuesto en los populares jugar la baza de la recuperación económica ante el nerviosismo interno tras el batacazo de las elecciones andaluzas. El presidente ha pedido a las candidaturas de las autonómicas y locales que se sientan orgullosos de haber salvado a España de la ruina. Para el máximo dirigente el PP […]
Dirigentes Digital
| 22 may 2015
Mariano Rajoy ha impuesto en los populares jugar la baza de la recuperación económica ante el nerviosismo interno tras el batacazo de las elecciones andaluzas. El presidente ha pedido a las candidaturas de las autonómicas y locales que se sientan orgullosos de haber salvado a España de la ruina. Para el máximo dirigente el PP es el único partido "creíble y serio" para seguir gobernando el país. La campaña ha empezado hace tiempo para el Ejecutivo con medidas inéditas bajo la legislatura como la reforma fiscal, que ha supuesto una bajada efectiva en el IRPF para las rentas bajas y medias, pero todavía lejos niveles tributarios de 2011, antes de que el Gobierno de Rajoy subiera los impuestos de manera generalizada.
Dentro del programa marco para la cita del 24 de mayo, Rajoy ha dado luz verde para que los candidatos autonómicos anuncien rebaja de impuestos en IRPF, Donaciones y Sucesiones, siempre que puedan permitirlo las cuentas de las Comunidades Autonómicas. También ayudas para el alquiler de primera vivienda y una bajada del IVA cultural. Pero principalmente lo que quiere es que los líderes locales y autonómicos prometan puestos de trabajo, un logro del actual Gobierno. Y es que Rajoy ha garantizado casi tres millones de empleos para la próxima legislatura si es reelegido.
El líder de los populares olvida que en 2012 ganó las elecciones con un programa electoral que le comprometía a bajar impuestos, de no poner ni un euro para las cajas ahorro, de no tocar las pensiones e impulsar la economía, y todo ello cumpliendo con los objetivos de déficit de Bruselas. Finalmente no sucedió y ha seguido el dictado de medidas impuesto por la Comisión Europea.
Por su parte, el PSOE parte con caras nuevas, liderado por Pedro Sánchez, pero todavía ni siquiera tiene definido un candidato para las generales y la inestabilidad interna es evidente. El futuro del partido pasa por el resultado del 24 de mayo. El objetivo del partido es presentarse como una alternativa de Gobierno alejada de los recortes y más igualitaria, pero mientras el resto departidos ya han articulado medidas más o menos concretas, el PSOE intenta definirse sin hacer mucho ruido. Hasta el momento se puede resumir en una subida generalizada de impuestos. Las líneas generales de su programa es recuperar el Impuesto sobre Patrimonio, garantizar un tipos reales del 15% en Sociedades y eliminar las ventajas fiscales de los planes de pensiones.