El cliente quiere una experiencia multicanal y poder realizar sus gestiones financieras a golpe de clic, ya no solo la banca tradicional puede ofrecerle ese servicio. Según el estudio WorldFintechReport 2017 de la consultora Capgemini y LinkedIn, España es ya el quinto país del mundo donde más porcentaje de personas utilizan servicios o productos fintech. […]
Dirigentes Digital
| 09 feb 2017
El cliente quiere una experiencia multicanal y poder realizar sus gestiones financieras a golpe de clic, ya no solo la banca tradicional puede ofrecerle ese servicio. Según el estudio WorldFintechReport 2017 de la consultora Capgemini y LinkedIn, España es ya el quinto país del mundo donde más porcentaje de personas utilizan servicios o productos fintech. Este pujante y nuevo sector sigue creciendo. Según el informe de Accenture “Fintech and the evolving landscape”, la inversión en fintech en 2015 alcanzó los 22.300 millones de dólares. En España, la inversión en 2015 creció un 40% y llegó hasta los 130 millones de euros. El sector financiero es consciente de este crecimiento. El informe de la consultora PwC “Cómo Fintech está redefiniendo el sector financiero” lo confirma. El estudio revela que la actividad fintech podría asumir en los próximos cinco años el 23% del mercado actual de los servicios financieros que presta la banca. La pregunta de si el fintech podría desencadenar una crisis sistémica en el sector está a la orden del día en todos los foros y charlas sobre la industria financiera. “Los reguladores tienen que estar atentos a la evolución de las startups fintech”, opinaba el presidente de BBVA, Francisco González, durante la celebración de un foro organizado por Business Insider (BI), aunque quiso quitar hierro al asunto afirmando que las nuevas firmas fintech representan una parte muy pequeña del sistema financiero“por ahora”. Sin embargo, la banca podría no disponer de tiempo para relajarse. En un informe del MIT, titulado “Digital Banking Manifesto: The end of Banks?”, los expertos son muy claros: los bancos deben apresurarse a poner en marcha una renovación integral para poder hacer frente a la entrada en acción de gigantes como Google, Amazon o Facebook, que podrían llegar a competir muy duramente en materia de pagos y moneda digital en los próximos años. Incluso, auguran que este cambio radical que se exigirá a los bancos podría desencadenar su total desaparición. Sin embargo, la banca tradicional no ha visto en las empresas fintech solo un competidor, también una oportunidad a la que unirse. Bankia ha sido la primera entidad en crear una incubadora enfocada únicamente a empresas del sector fintech. Hace unas semanas, el presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, anunciaba que abría la primera convocatoria internacional de la incubadora para “reforzar su apuesta por el mercado fintech”. Esto mismo confirma el estudio de la consulta Mayer Brown de noviembre de 2016, “The ABC of Fintech: Acquisitions, Brexit and Collaboration”, en el que el 33% de los dirigentes de banca encuestados afirmó querer adquirir un negocio fintech en los próximos tres años. Además, el 25% de estos dirigentes tenía intención de intensificar estas inversiones en fintech en los próximos años.