En primer lugar, como no podía ser de otra forma, la firma hace referencia a la Reserva Federal (Fed) y los pronósticos que apuntan a que la primera subida de tipos se producirá el año que viene, en concreto, estos expertos prevén que sea en junio. En este sentido, señalan que la curva de las […]
Dirigentes Digital
| 10 dic 2014
En primer lugar, como no podía ser de otra forma, la firma hace referencia a la Reserva Federal (Fed) y los pronósticos que apuntan a que la primera subida de tipos se producirá el año que viene, en concreto, estos expertos prevén que sea en junio. En este sentido, señalan que la curva de las rentabilidades de la deuda estadounidense se aplanará y apuestan por posicionarse cortos en el oro.
Por otro lado, ante las divergentes políticas monetarias que se van a implementar a ambos lados del Atlántico, pues el Banco Central Europeo (BCE) va a aumentar sus estímulos, Barclays señala que la fortaleza del dólar será persistente, por lo que aconseja ponerse cortos en el cruce euro/dólar; así como primar la inversión en pequeñas empresas estadounidenses frente a grandes corporaciones (Russell 2000 vs. S&P 500).
En lo que respecta a la caída de los precios del petróleo, el banco británico considera que "las implicaciones negativas ya están descontadas", mientras que las positivas lo están menos, por lo que su consejo es apostar por los valores de consumo discrecional y las acciones coreanas.
La "sorpresa" del Banco de Japón (BoJ por sus siglas en inglés) de aumentar aún más sus medidas de estímulo, lleva a estos expertos a aconsejar ponerse largos en renta variable nipona (grandes empresas).
En quinto lugar, la firma señala que se descuenta un escenario para Europa similar al de este último país asiático, "pero el BCE puede cambiar eso". En su opinión, si tiene éxito a la hora de prevenir la deflación, la renta variable periférica (Italia y España) se verá beneficiada frente a su deuda soberana a largo plazo.
Asimismo, Barclays apunta a que la amplia negatividad sobre el crecimiento global y China "podría ser una buena oportunidad", para aprovecharla recomienda apostar por emergentes que se beneficiarán del aumento de la actividad en Estados Unidos, los bajos precios del crudo y los estímulos de China, como sería el caso de Corea, el propio gigante asiático e India. También, en este sentido, señala su preferencia sobre valores cíclicos frente a defensivos.
Con todo, reconoce que los mercados emergentes se enfrentan a varios "vientos en contra" (Fed, China, fortaleza del dólar y bajos precios del crudo), pero como oportunidad señalan los bonos de Indonesia, India y México. Por otro lado, estos expertos consideran que habrá un buen entorno las operaciones de carry trade en divisas; y también recomiendan un posicionamiento largo en los activos de India.