Tras resistir el atentado de Manchester y las dudas sobre EEUU y Brasil con subidas superiores al 1%, la cautela se impone hoy en el Ibex 35, que rebaja el impulso de los avances asimilando el posible despertar del ‘monstruo silencioso’ en el que China se ha convertido en los últimos meses. El selectivo pierde […]
Dirigentes Digital
| 24 may 2017
Tras resistir el atentado de Manchester y las dudas sobre EEUU y Brasil con subidas superiores al 1%, la cautela se impone hoy en el Ibex 35, que rebaja el impulso de los avances asimilando el posible despertar del ‘monstruo silencioso’ en el que China se ha convertido en los últimos meses. El selectivo pierde un 0,08% para consolidar de momento los 10.900 puntos alcanzados ayer de la mano de la banca. Moody’s apunta al elevado endeudamiento que el país ha acumulado durante los años de crecimiento, y rebaja el rating de Aa3 hasta A1. Lo cierto es que la oleada de apetito por el riesgo en Europa y EEUU había eclipsado el debilitamiento de ciertos indicadores en China que apuntan a una mayor desaceleración del gigante asiático. Sin ir más lejos, los cuatro índices PMI, manufacturas, servicios, Caixin y Markit, del país se contrajeron en abril respecto a marzo, y en una cuantía considerable (entre 0,6 y 1,1 puntos). En el apartado macro, los inversores estarán hoy especialmente atentos a la publicación de las actas de la Fed, que, con el mercado europeo ya cerrado, podrían ofrecer nuevas pistas sobre si finalmente la próxima subida de tipos llegará en la reunión que el organismo presidido por Janet Yellen mantendrá en junio. El Banco Central Europeo (BCE) también ha sido protagonista con la intervención de Mario Dragui en una conferencia en Madrid. El presidente del organismo ha dejado claro que “no hay motivos para desviarse” de sus planes, reafirmando su compromiso de poner fin a los estímulos antes de iniciar las subidas de tipos. Alabando el crecimiento económico en la Zona Euro, Draghi también ha querido mandar un mensaje de advertencia a los inversores en renta fija, al asegurar que aún existe riesgo de una fuerte subida en la rentabilidad de algunos segmentos de la categoría. Aún así, considera que “una gradual normalización del rendimiento de los bonos a la vez que mejoran las perspectivas económicas sería beneficioso para la estabilidad financiera”. Draghi ha destacado, no obstante, el potencial contagio del alza de intereses de la deuda en otras economías avanzadas, particularmente en EEUU, donde la política monetaria de la Reserva Federal (Fed) avanza en sentido opuesto a la del BCE. Mientras el barril de Brent vuelve a subir sobre los 54 dólares, a la espera de la reunión de mañana de la OPEP, en el el mercado de divisas el cruce euro/dólar se mantiene en 1,12 dólares, “máximos desde el mes de septiembre, a excepción del repunte momentáneo que se registró tras conocerse el triunfo de Trump”, recuerdan desde IG. Sin embargo, resulta curioso y en cierta medida, contradictorio, que la inestabilidad política creciente en EEUU esté sirviendo para deteriorar al dólar y no así a las Bolsas americanas. “La fuerte subida del euro tiene otra explicación: la fortaleza de los datos macroeconómicos europeos”, indican desde la firma.