El vicesecretario de Organización del PSPV-PSOE y miembro de la comisión negociadora con Compromís, Alfred Boix, ha señalado a los periodistas que "ha sido infinita la paciencia" que han tenido en el proceso negociador, pero "la paciencia tiene un límite y la avaricia rompe el saco".
"No vamos a jugar a estrategias de alargar esto en el tiempo", ha dicho Boix, quien ha recordado que su partido fijó el 10 de junio -un día antes de la constitución de Les Corts– como fecha límite para un acuerdo, pero es necesario tener un Gobierno "lo antes posible", sin esperar a julio, como ha sostenido Compromís.
"No podemos dilatar esto", ha mantenido Boix, para quien los ciudadanos quieren notar ya el cambio político, y además hay que abrir los comedores escolares en julio y discutir el calendario escolar y las ayudas a la gratuidad a los libros de texto, lo cual "no pasa por tener un gobierno en julio".
A partir de ahora, ha dicho, seguirán trabajando para ver cómo pueden "confluir en un espacio de gobernabilidad" con el resto de formaciones políticas, como Ciudadanos, porque tienen "la responsabilidad de gobernar la Generalitat" como segundo partido más votado en la Comunitat y "el primero del cambio".
Ha afirmado que, mientras tanto, esperarán "las rectificaciones necesarias", pero ha alertado de que "esto no es una prueba de fuerza", sino "un gesto político contundente, meditado y serio", y ha destacado que Compromís "no tiene que ceder nada", en referencia a la presidencia de la Generalitat, sino "apoyar al partido más votado".
Preguntado por si las conversaciones están suspendidas o rotas, ha afirmado: "he dicho suspender, pero usted si quiere puede decir romper". Boix ha explicado que ha adoptado la decisión de suspender las reuniones con Compromís esta mañana, tras analizar las declaraciones de ayer de la coalición en las que "descalificó" al PSPV y su legitimidad para gobernar, unido a la imposibilidad de mantener reuniones bilaterales entre socialistas y Compromís.
Además, ha criticado que "parece que el PSPV siempre sea bueno para dar la estabilidad a los gobiernos y no para recibirla", lo que supone "otro insulto" de los que han tenido que "soportar estos días", algo que "no es serio, no es justo, y alguno se tiene que revisar los parámetros democráticos para conformar mayorías".
Ha indicado que "esto no es una cuestión de tres", sino una negociación con Compromís en la que la coalición "invitó a Podemos", y ha asegurado que no van a conformar "ningún tipo de gobierno con el PP", ni en el pueblo "más pequeño de la Comunitat".
El dirigente socialista ha insistido en la necesidad de un cambio en la Generalitat, el Ayuntamiento de Valencia y ciudades como Gandia y Torrent, y ha opinado que hay que ser "equilibrados, justos y coherentes en las acciones".
Sobre si en el Ayuntamiento de Valencia mantienen que apoyarán la investidura de Joan Ribó (Compromís) como alcalde, pero no entrarán en el gobierno local, Boix ha dicho: "Lo único que puedo decir es que las conversaciones y las reuniones están suspendidas", también en la ciudad de Valencia.
El representante de Compromís en la comisión negociadora con PSPV-PSOE y Podemos para pactos en la Generalitat, Pasqual Mollà, ha dicho que los socialistas "se equivocan" si pretenden hacer "una especie de prueba de fuerza" como anunciar que rompen las relaciones con la coalición.
Mollà ha señalado que el PSPV debe entender que "las cosas han cambiado, y que el diálogo abierto y transparente, sin tapujos, y la paciencia" forman parte de los nuevos tiempos que se han abierto tras las elecciones, por lo que no comparte sus "salidas de tono". El representante de Compromís, a quien formalmente no le consta que el PSPV-PSOE haya roto las relaciones con ellos al sentirse "insultados" con la postura de la coalición, afirma que no hay que ofenderse "por la democracia", que consiste en "tener planteamientos distintos".
Compromís insiste en que Mònica Oltra debe ser la presidenta de un Consell donde el socialista Ximo Puig tendría un papel "muy protagonista" y podría ejercer una influencia "muy importante", y lamenta que la única respuesta del PSPV es que Puig debe ser president, sin plantear nada más.