Steve Bocamazo, director asociado de investigación crediticia, habla de las tendencias en el sector del automóvil y espera que "que los gustos del consumidor sigan cambiando en 2016 con el vehículo crossover (CUV, cross-over vehicle) ganando cuota de mercado, principalmente a expensas de los turismos pequeños y medianos". Se centra en la industria alimentaria británica […]
Dirigentes Digital
| 02 ene 2016
Steve Bocamazo, director asociado de investigación crediticia, habla de las tendencias en el sector del automóvil y espera que "que los gustos del consumidor sigan cambiando en 2016 con el vehículo crossover (CUV, cross-over vehicle) ganando cuota de mercado, principalmente a expensas de los turismos pequeños y medianos".
Se centra en la industria alimentaria británica Zahiye Yuksel, analista de investigación crediticia sénior, y destaca que " está pasando por una transformación estructural. El cambio de preferencias de los consumidores y la sensibilidad a los precios han resultado en una polarización del mercado. Los consumidores son cada vez más conscientes del coste y más consumidores están haciendo la compra de los productos básicos en establecimientos minoristas de descuento, los dos principales con su sede central en Alemania. Sin embargo, los consumidores siguen eligiendo supermercados orientados a una clientela de mayor poder adquisitivo, para los artículos de marca. La recuperación de la economía y la mejora de la confianza del consumidor puede disminuir el atractivo de los establecimientos minoristas de descuento, pero con el fin de seguir siendo competitivos, los supermercados generales, tendrán que ofrecer precios bajos de manera consistente, invertir en el servicio y la calidad y tener una buena actuación en los crecientes segmentos en línea y tiendas de conveniencia. Los que lo hagan deberían beneficiarse del apalancamiento operativo, mientras que los que no lo hagan es probable que den trompicones".
Tony Ursillo, analista financiero sénior, considera que serán tres las tendencias que sigan influyendo en la industria tecnológica en 2016: consolidación, la ruptura que supone la nuble y activismo. Así, recomienda realizar inversiones que se aprovechen de las tendencias ligadas a la nube o que no vayan a ser barridas por su estela de destrucción (redes sociales, por ejemplo). Evitar la exposición a empresas que se hayan visto afectadas por las tecnologías rupturistas basadas en la nube. Seguir buscando acciones que podrían beneficiarse del pago de otra entidad crediticia, con el fin de hacerse cargo única y completamente de una garantía o presiones de activistas tradicionales, como la mejora de los márgenes y mejores políticas de rendimiento del capital".
Al mismo tiempo, Janet Sung, analista de investigación crediticia sénior, cree que "el streaming de vídeo en línea se convertirá en un fenómeno clave que ayude a impulsar el futuro de la industria de las telecomunicaciones, el cable y los medios de comunicación. En 2016, la visualización de contenidos de vídeo en línea continuará proliferando, con el lanzamiento muy esperado del servicio de suscripción de vídeo de Apple TV viniendo a sumarse a los recientes lanzamientos del Sling de DISH, GO90 de Verizon, Watchable de Comcast, Now de HBO, y el crecimiento acelerado de Netflix y YouTube. Es probable que el número de suscriptores de video por cable, especialmente los de paquetes más grandes, siga disminuyendo. Los distribuidores de cable deberían ganar cada vez más cuota del mercado residencial de los operadores de telecomunicaciones y satélites ya que su mayor calidad/mayor velocidad de conexión a Internet se convierte en fundamental para la descarga de vídeo".
En lo que respecta al sector bancario de Estados Unidos, Elizabeth Schroeder, analista de investigación crediticia sénior, apunta a que "la mayoría de los balances siguen siendo muy fuertes, con altos ratios de capital, liquidez y una cartera morosa y pérdidas crediticias históricamente bajas. La calidad de los préstamos al sector del petróleo y el gas está siendo observada de cerca, pero las exposiciones actualmente parecen demasiado pequeñas como para tener un impacto significativo en las estadísticas de la calidad de los activos. En general, las entidades siguen resistiendo bien el entorno de bajos tipos de interés y deberían beneficiarse de cuando empiecen a subir".
Si bien, Julian Wellesley, analista financiero sénior, recuerda que la industria financiera de todo el mundo "se enfrenta a una variedad de desafíos. En Europa, el nuevo regulador de la zona euro está haciendo cumplir normas más estrictas de capital bancario. Y en gran parte de Asia, la banca hace frente al deterioro de la calidad crediticia debido a las repercusiones de la desaceleración económica de China. No creo que las perspectivas de la banca vayan a mejorar mucho hasta que la economía mundial comience a retomar un nuevo impulso en el 2016".
Mercados de crédito
Por su parte, Cheryl Stober, gerente de productos, añade que "algunos inversores consideran que los préstamos solo son útiles en un entorno de tipos ‘al alza’. 2015 demostró que son más que eso. El rendimiento de los préstamos, en particular los préstamos conservadores, realmente sobresalió frente a otras clases de activos de renta fija a pesar de las continuas demoras de la Reserva Federal en subir los tipos de interés. Nuestra perspectiva para el 2016 sigue siendo positiva ya que un calendario de vencimientos de préstamos bancarios limitado debe conducir a otra tasa de morosidad anual por debajo del promedio".
En cuanto a los activos titulizados, Jennifer Thomas, analista de este tipo de productos, subraya que en 2015 proporcionaron una "isla de relativa estabilidad en un mercado volátil. Esperamos que esta tendencia continúe en 2016 al igual que los factores que condujeron a ella: el fuerte balance del consumo; el aumento de los precios de bienes raíces y la limitada emisión". En el lado de los riesgos, advierte del "potencial deterioro de las prácticas de suscripción, bienes raíces sobre todo comercial y préstamos de automóviles; el importe y el ritmo de endurecimiento de la Reserva Federal; y los cambios de liquidez de mercado impulsadas por la regulación bancaria".
Mientras, Barath Sankaran, analista de activos titulizados, añade que el año que viene "el rendimiento de los valores respaldados por hipotecas de agencias (MBS, mortgage-backed securities) seguirán haciendo frente a los vientos en contra. Nuestra opinión es que el diferencial actual no compensa la posibilidad de rescate de los MBS de agencias: una gran parte de los prestatarios en circulación tiene antecedentes de crédito muy limpios, lo que significa que sus hipotecas se refinancian con mayor facilidad. La incertidumbre será un tema clave para el 2016; las perspectivas de las hipotecas y la postura de la Reserva Federal están sujetas a cambios. Nos resulta difícil ver que valga la pena dados los posibles riesgos".
Apuntes regionales
Sobre el impacto de El Niño en Asia advierte Celeste Tay, analista del riesgo soberano sénior, pues recuerda que cada 20 años este fenómeno cobra especial fuerza y el de este ciclo podría rivalizar con el de 1997, que fue sumamente fuerte.
"Al mismo tiempo, la acumulación de apalancamiento en Asia en los últimos años es una amenaza que pende sobre el crecimiento. A medida que el crecimiento se desacelera en la región, la política monetaria se convierte en una consideración importante a la hora de considerar qué países están mejor situados para hacer frente a los desafíos macroeconómicos que se avecinan. En los lugares donde una mayor inflación y liquidez externa son ya limitaciones a la política monetaria, es probable que El Niño sea una complicación añadida. En ambos aspectos, Indonesia se destaca como la más vulnerable", señala.
Añade, Elisabeth Colleran, gestora de cartera, que "el crecimiento desigual continuará en China el próximo año cuando la economía pase de estar impulsada por la industria y la inversión a estar impulsada por los servicios y el consumo. Sin embargo, hay algunos focos potenciales de oportunidad como el sector inmobiliario, pues las promotoras inmobiliarias deberían beneficiarse de la relajación de las restricciones a las hipotecas y de la política monetaria, el acceso a un mercado de bonos nacional creciente para la financiación y estrategias más prudentes de inversión; las compañías de Internet, ya que las gigantes en esta industria, que proporcionan redes sociales, videojuegos y comercio electrónico, es probable que sigan creciendo con fuerza dado el creciente número de usuarios, la creciente demanda de los consumidores y la mejora en la monetización; y las reformas en curso, ya que las grandes empresas controladas por el Estado, a menudo líderes de la industria, podrían ofrecer mejores oportunidades de inversión ya que el gobierno central pretende impulsar la consolidación, atraer la inversión privada y mejorar la transparencia".
En Europa, Spyros Katsaros, analista de investigación crediticia sénior, el riesgo político seguirá siendo alto. "Las recientes elecciones no concluyentes en Portugal, las próximas elecciones en España (diciembre de 2015) y el debate en curso en Alemania en torno al cierre de las centrales nucleares se vislumbran en el horizonte. Además, una serie de empresas europeas tienen una presencia importante en América Latina. Mientras que la mayoría están protegidos en gran medida de la desaceleración del crecimiento en la región, ya que gestionan empresas reguladas, la depreciación de las divisas de la región ya está afectando negativamente los resultados financieros".
Finalmente, en Estados Unidos, la Fed "caminará en la cuerda floja", en palabras de Michael Gladchun, operador de renta fija. "Es probable que la tasa de desempleo caiga por debajo de los niveles previstos por la Reserva Federal, lo que contribuiría a aumentar la presión para que endurezcan la política monetaria a un ritmo algo más rápido. Sin embargo, con los salarios y las presiones inflacionarias generales probablemente se mantendrá moderada, sospecho que la Reserva Federal aliviará esta presión mediante la rebaja de su estimación de la tasa natural a largo plazo del desempleo. Esto implicaría una reacción más conciliadora, lo que sería reconfortante para los mercados globales que ya están preocupados por el ritmo de aumento de los tipos el próximo año", concluye.