¿Qué tiene en común BMW o Shell? Pues que ambas son multinacionales que han apostado por mover gran parte de sus recursos a Estados Unidos. El fabricante alemán de automóviles tiene su filial estadonidense en Nueva Jersey, mientras que la petrolera holandesa desarrolló sus reservas de crudo y gas en suelo estadonidense, además su nueva […]
Dirigentes Digital
| 09 jul 2017
¿Qué tiene en común BMW o Shell? Pues que ambas son multinacionales que han apostado por mover gran parte de sus recursos a Estados Unidos. El fabricante alemán de automóviles tiene su filial estadonidense en Nueva Jersey, mientras que la petrolera holandesa desarrolló sus reservas de crudo y gas en suelo estadonidense, además su nueva fábrica de empaquetado de plástico en Luisiana. En total, la inversión extranjera directa (FDI por sus siglas en inglés) de compañías foráneas aportó hasta 767.000 millones a la economía doméstica y creó hasta 6,4 millones de puestos entre los americanos en 2014, según los últimos datos recogidos por el think tank Trade Vistas. Reino Unido es el país que más intereses tiene puestos en EEUU, con una inversión directa de multinacionales que alcanzó los 502.000 millones de euros (18,2% del total). Le siguen de cerca Japón, con 365.000 millones (13,2%), y Canadá, con 302.000 millones (10,9%). Cierran el ‘top 5’ Alemania y Francia. Estas filiales invirtieron en desarrollo e innovación hasta 53.000 millones, además de concentrar hasta el 26% del total de exportaciones y hasta 30,3% de las importaciones. El 45% de la FDI se concentró en el secor manufacturero, fundamentalmente en la industria química (farmacéutica, transporte, maquinaria). También, el comercio al por mayor acaparó hasta el 11% del total y el negocio financiero y asegurador otro 10,4%. Según el informe, sólo el sector manufacturero generó por si sólo hasta 2 millones de empleos y la ganancia anual de los trabajadores empleados en filiales es un 30% superior a la media de los trabajadores domésticos.