La incertidumbre que rodea al futuro de Reino Unido tras el resultado del referéndum del Brexit ha pasado factura a los presupuestos presentados por Theresa May. El ministro de Finanzas, Philip Hammond, ha anunciado que estas dudas minarán las inversiones y el consumo en el país y eso tendrá repercusión en el crecimiento de 2017, […]
Dirigentes Digital
| 23 nov 2016
La incertidumbre que rodea al futuro de Reino Unido tras el resultado del referéndum del Brexit ha pasado factura a los presupuestos presentados por Theresa May. El ministro de Finanzas, Philip Hammond, ha anunciado que estas dudas minarán las inversiones y el consumo en el país y eso tendrá repercusión en el crecimiento de 2017, cuyas previsiones han rebajado de un 2,2% inicial al 1,4% según la Oficina de Responsabilidad Presupuestaria. Según informa la agencia France Presse, Hammond también ha reducido las previsiones de crecimiento de los tres años siguientes: al 1,7% en 2018, al 2,1% en 2019 y 2020. “Aunque la OBR deja claro que no puede predecir qué clase de acuerdo alcanzará el Reino Unido con la UE, su opinión actual es que la decisión del referéndum significa que el crecimiento potencial en el periodo estimado será menor”, ha señalado Hammond. “Esta revisión se debe a un descenso de la inversión y a una demanda menor, que se explican respectivamente por el incremento de la incertidumbre y la devaluación de la libra”, efecto, en ambos casos del Brexit. Además, el ministro ha declarado que el país tendrá que endeudarse en 216.300 millones de libras en cinco años en vez de los 94.300 que calculaba el pasado marzo, lo que supone una diferencia de 122.000 millones (unos 143.000 millones de euros). De este modo, Hammond da por imposible el objetivo del anterior Gobierno de lograr un superávit presupuestario en el ejercicio 2019-2020. “Mantendremos nuestro compromiso con la disciplina fiscal, al tiempo que reconocemos la necesidad de invertir para impulsar la productividad y entregar libertad fiscal para apoyar a la economía durante esta transición”, ha señalado Hammond. De cumplirse las previsiones de Hammond, el endeudamiento del país superará el 90% del PIB. Otras partidas A esto, Hammond ha anunciado que en los presupuestos se han incluido varias medidas, como una subida del salario mínimo del 4% y la eliminación de las comisiones a agentes inmobiliarios en contratos de arrendamiento. El salario mínimo aumentará de 7,2 a 7,5 libras la hora (8,8 euros) a partir de abril de 2017. Es el segundo incremento este año, porque a finales de marzo pasó de 6,70 libras a 7,20 libras. El gobierno dedicará asimismo una partida de 1.400 millones de libras (1.640 millones de euros), para ayudar a la construcción de 40.000 nuevas viviendas, y de 1.300 millones de libras para mejorar las infraestructuras, concretamente las carreteras.