primer ministro británico, David Cameron, apuesta por medidas duras para frenar el aumento de la inmigración europea e intentar así mantener votos y que no se vayan al partido euroescéptico Partido por la Independencia del Reino Unido (UKIP, en sus siglas en inglés)) de cara a las elecciones de mayo y tras fracasar ensu promesa […]
Dirigentes Digital
| 14 ene 2015
primer ministro británico, David Cameron, apuesta por medidas duras para frenar el aumento de la inmigración europea e intentar así mantener votos y que no se vayan al partido euroescéptico Partido por la Independencia del Reino Unido (UKIP, en sus siglas en inglés)) de cara a las elecciones de mayo y tras fracasar ensu promesa de reducir la inmigración neta en Reino Unido por debajo de las 100.000 personas.
La nueva propuesta de Cameron pasa por expulsar a aquellos inmigrantes europeos que tras varios meses de búsqueda de empleo no lo hayan conseguido. "Si un ciudadano de la UE no ha encontrado empleo en seis meses", explicó el primer ministro. "El 40% de los que vienen a trabajar a Reino Unido no tiene una oferta de trabajo cuando llega", puntualizó.
Además, los inmigrantes comunitarios no tendrán acceso a los subsidios para la vivienda o para sus hijos hasta que no lleven cuatro años trabajando en Reino Unido. Se calcula que en la actualidad cerca de 400.000 ciudadanos de países de la UE reciben actualmente este tipo, lo que muchos critican como injustas. Cameron también quiere impedir que los ciudadanos de los nuevos países de la UE puedan trabajar en Reino Unido hasta que sus economías se hayan equiparado al nivel del resto y acelerar la deportación de delincuentes, así como alargar el periodo de prohibición de reingreso para los mendigos y los defraudadores que hayan sido expulsados del país.
Al dar a conocer estas medidas, Cameron no tuvo reparos en valorarlas como "radicales" y además instó a otros líderes europeos a apoyar sus propuestas, que cree "razonables" para frenar las prestaciones sociales a los inmigrantes, llegando a decir que "no descartaba nada" sobre una posible salida de Reino Unido de la UE si en las próximas negociaciones "se hacen oídos sordos a nuestras inquietudes".
"Sin duda, aplicar este paquete de medidas en su conjunto necesitará cambios en los tratados", dijo Cameron, a lo que Bruselas respondió que sus propuestas serán "parte del debate". Para la portavoz de la Comisión Europea (CE) Margaritis Schinias, la UE está dispuesta a discutir las propuestas de Cameron "tranquila y cuidadosamente" y se trata de propuestas que tendrán que ser "examinadas sin dramatismos, tranquila y cuidadosamente".
Datos sobre inmigración
El discurso de Cameron se produjo días después de hacerse público los datos de la Oficina Británica de Estadística que señalan que los extranjeros que vinieron a trabajar a Reino Unido menos el total de británicos que se fue a trabajar al exterior, entre junio de 2013 y junio de 2014, fue de 260.000 personas.
Es decir, una subida interanual del 43%, la segunda mayor desde que existen registros. Además, es una cifra muy superior a la de 100.000 inmigrantes en la que se quería quedar Cameron. En la actualidad, Reino Unido tiene 2,7 millones de ciudadanos de otros Estados de la Unión Europea, es decir el 4,3% de la población del país. En el caso de España es el segundo país que más inmigrantes aportó a Reino Unido en 2013, con un total de 33.000 personas.
Puede leer el reportaje completo en nuestra revista Dirigentes del mes de enero.