Robots, la revolución de las máquinas y la economía

El mismo Elon Musk, cofundador de PayPal, Tesla Motors, y Space X afirmó en otoño de 2014 que el desarrollo en inteligencia artificial era poco menos que "invocar al demonio". Ahora, apenas un año después, Musk, junto a otros titanes de la tecnología, ha fundado OpenAI, una compañía sin ánimo de lucro con el único fin de investigar en este sentido, ya que han terminado reconociendo que la robótica es el futuro de la tecnología.

2015 fue el año clave para la innovación, según el investigador principal de Google, Jeff Dean. Los avances sin precedentes en inteligencia artificial se pueden atribuir a una confluencia de factores. Por un lado, la infraestructura de computación en la nube, que ahora es mucho más potente y con mayor capacidad de procesar información compleja; por otro, la abundancia de datos; y por último, la gran cantidad de nuevas herramientas y software gratuitos o de bajo coste que ayudan a los investigadores a trabajar. Gracias a esto, los ordenadores son más inteligentes y aprenden más rápido que nunca.

Décadas después de inventar el primer robot trabajador (1961), el desarrollo al que asistimos hace posible que estemos "en una nueva era de la robótica", según Arturo Baroncelli, presiente de la Federación Internacional de Robótica (FIR). Según cálculos de Baroncelli, la aplicación industrial de los autómatas es la más explotada en este momento, con 1,5 millones de robots trabajando actualmente en fábricas de todo el mundo, una cifra que ascenderá a 2,3 millones en los próximos 3 años.

Aunque por el momento la robótica está lejos de entrar en la vida cotidiana de las personas, los expertos imaginan un futuro no muy lejano en el que habrá robots similares a seres humanos con capacidad de escuchar, ver, conversar e identificar diferentes entornos. Incluso, podrían tener recuerdos que les permitan pensar y tomar decisiones. Según estos científicos, los robots de servicio se convertirán en la próxima industria robótica en auge y en diez años, sus ventas superarán a las de los robots industriales, los cuales representan el 80% del mercado mundial.

Entre el desarrollo y la preocupación

"Las empresas que se roboticen en cuantos procesos sean susceptibles, no sobrevivirá", apunta Xavier Grau, gerente de la Asociación Española de Robótica y Automatización de las Tecnologías de la Producción" (AER-ATP). En este mercado, como explica Grau, los países asiáticos y sobre todo China, están a la cabeza. El país ha diseñado un plan de desarrollo de cinco años, denominado "Made in China 2025", para la industria de robots. Según los expertos, este es un intento de impulsar al país, para pasar de ser la mayor potencia manufacturera del mundo, a una de las economías impulsadas por la tecnología más fuerte del globo.

Puede leer el reportaje completo en la revista DIRIGENTES del mes de enero