A un día de que Pedro Sánchez se reúna con Pablo Iglesias, el dirigente socialista se ha plantado y ha dejado clara su posición: "Ciudadanos debe estar en un gobierno del cambio". Así lo ha declarado en la cadena SER el secretario general del PSOE. El esperado encuentro entre los máximos dirigentes de las dos […]
Dirigentes Digital
| 29 mar 2016
A un día de que Pedro Sánchez se reúna con Pablo Iglesias, el dirigente socialista se ha plantado y ha dejado clara su posición: "Ciudadanos debe estar en un gobierno del cambio". Así lo ha declarado en la cadena SER el secretario general del PSOE.
El esperado encuentro entre los máximos dirigentes de las dos principales fuerzas de izquierdas del país se ha visto precedido de una reafirmación de Sánchez en su decisión de contar con Ciudadanos en su intención de formar gobierno cuanto antes. El dirigente socialista ha admitido que hay muchas cosas que les separan a los partidos, el de Rivera es de derechas y el de Sánchez de izquierdas, sin embargo, lo que les une es "la intención de sacar a España del atasco en el que nos ha dejado Rajoy".
Tras varias conversaciones con otras fuerzas políticas, agentes sociales y representantes de diferentes colectivos, Sánchez hizo público la revisión del pacto que ya tenían con el partido de Albert Rivera. PSOE y Ciudadanos repasaron el acuerdo y alcanzaron lo que desde las formaciones se ha denominado "una versión mejorada". Con las modificaciones pertinentes que se han llevado a cabo, Sánchez espera haber preparado el terreno para su reunión con Pablo Iglesas.
Sobre la reunión que tendrá con el líder de Podemos el secretario general de PSOE ha sido claro: "Espero que Pablo Iglesias vaya con una predisposición de avanzar en las negociaciones".
Sánchez tiene claro su objetivo: conseguir que Iglesias ‘trague’ con Ciudadanos. Sin embargo, a Podemos el partido de Albert Rivera se les atraganta. El morado y el naranja no terminan de casar bien y a Sánchez le va a costar sudor y lágrimas que Pablo Iglesias acepte formar parte de un gobierno en el que esté presente alguna fuerza que no sea de izquierdas.
Pedro Sánchez está centrado en formar gobierno y no tiene tiempo de pensar en otra cosa, ni siquiera en la posibilidad de que Susana Díaz le arrebate su puesto sin haber podido cumplir ni dos años al frente del partido. Al ser preguntado sobre si temía a Susana Díaz, el actual secretario general del PSOE fue rotundo: "En absoluto". Está centrado en formar gobierno cuanto antes y el tema de su reelección o posible reemplazo en favor de la presidenta andaluza es una cuestión que ha decido apartar temporalmente. En Ferraz han decido aplazar el Congreso hasta que no haya Gobierno, lo que supone más días para que Susana Díaz prepare su posible asalto a la serectaría general del partido.
Las últimas elecciones trajeron al PSOE sus peores resultados de la historia. Sin embargo, Sánchez se justifica: "Los resultados del partido fueron mejorables, pero el sistema político española ha cambiado y quien no lo vea se estará haciendo trampas al solitario". Pero más allá de lo que ha supuesto para el partido el resultado del 20D, para el país lo importante es que ahora mismo el PSOE es quien más posibilidades tiene de gobernar, al menos porque parece, junto a Ciudadanos, el único partido empeñado en que no se celebren nuevas elecciones.
Sánchez considera que las negociaciones que se han llevado a cabo hasta ahora no son para nada infructuosas. El dirigente socialista ha considerado el pacto con Ciudadanos "el primer paso hacia el cambio". "Ahora nos falta el paso izquierdo" asegura Sánchez a la hora de hablar de la reunión que tendrá con Pablo Iglesias.