Esa fecha era la decidida en un principio para su estreno hasta que un ataque de piratas informáticos, procedente del país asiático según el FBI, filtró decenas de miles de documentos de los estudios de cine, y un grupo autodenominado Guardianes de la paz amenazó a los espectadores que acudieran al cine con sufrir consecuencias similares a las víctimas del atentado terrorista del 11S.

La decisión de suspender su estreno por parte de Sony respondió también a la actitud de varias cadenas de cine estadounidenses, que decidieron no proyectar la película para evitar posibles represalias. 

Varios actores, encabezados por George Clooney, así como el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, no dudaron en criticar la decisión de Sony, que atentaba claramente contra la libertad de expresión. Estas opiniones han empujado a la compañía a permitir de nuevo la proyección de "The Interview". 

El fundador de la cadena de cines Alamo Drafthouse, Tim League, ha anunciado a través de Twitter que Sony les ha autorizado a proyectar la película. El Plaza Atlanta, por su parte, ha informado de que el 25 de diciembre estrenará "La entrevista".

¿A las puertas de una guerra Corea del Norte-Estados Unidos?

El ciberataque a Sony en Estados Unidos ha provocado el aumento de las tensiones con Corea del Norte, responsabilizado del ‘hackeo’ por parte de Washington. El país asiático hizo público, mediante un comunicado, su intención de llevar a cabo una ‘guerra’ en territorio estadounidense, por las que considera falsas acusaciones. Corea del Norte, por su parte, sufrió la madrugada de el pasado lunes cortes en su servicio de Internet.

"El Ejército y el pueblo de la RPDC (Corea del Norte) están completamente preparados para un enfrentamiento con Estados Unidos en todos los espacios de guerra, incluyendo la cibernética", expuso el régimen de Kim Jong-un en un comunicado publicado por la agencia estatal KCNA. Este comunicado también rezaba: "Nuestro más duro contraataque se dirigirá a la Casa Blanca, el Pentágono y todo el territorio continental de Estados Unidos superando con creces el contraataque simétrico declarado por Obama".

En este escrito Corea del Norte reiteraba además, que no tiene nada que ver con esta agresión cibernética, e incluso propuso al FBI llevar a cabo una investigación conjunta de lo ocurrido, una ayuda descartada por los servicios de inteligencia del país.

El presidente estadounidense, Barack Obama, anunció ante los hechos que iba a iniciar un proceso para evaluar si el Estado comunista debe o no ser incluido de nuevo en la lista negra de países que patrocinan el terrorismo. La inclusión representa restricciones a la ayuda exterior, la prohibición de las exportaciones y las ventas de defensa, controles sobre algunas exportaciones y diversas trabas financieras.