Dejar en un segundo plano el negocio de banca de oficina para el cliente minorista y centrarse en los altos patrimonios. Es a grandes rasgos el plan que maneja Standard Chartered con el fin de demostrar su capacidad de volver a beneficios, tras unos años difíciles marcados por el pago de cuantiosas multas en EE […]
Dirigentes Digital
| 12 nov 2014
Dejar en un segundo plano el negocio de banca de oficina para el cliente minorista y centrarse en los altos patrimonios. Es a grandes rasgos el plan que maneja Standard Chartered con el fin de demostrar su capacidad de volver a beneficios, tras unos años difíciles marcados por el pago de cuantiosas multas en EE UU y varios profit warning que le han llevado a convertirse en el peor banco cotizado de la City.
La entidad, que registra más de tres cuartas partes de sus ingresos en Asia, planea el cierre de 100 sucursales minoristas en 2015, un 8% de su red, para ahorrar unas 252 millones de libras (400 millones de dólares) al año y volver a ser rentable. Su objetivo será a partir de ahora incrementar los activos bajo gestión en su unidad de gestión patrimonial y banca privada un 10% el próximo año.
Durante una presentación en Hong Kong ante sus grandes inversores, el director financiero de la entidad, Andy Halford, se mostró confiado en dar una vuelta a la cotización de la compañía, que cae un 31% en lo que va de año, más del doble que las pérdidas que registra Barclays, el segundo peor banco del país en Bolsa.
Temasek, el brazo inversor del Gobierno de Singapur, es precisamente el mayor accionista de Sandard Chartered, con un 18% del capital en su poder. Le sigue el gigante Aberdeen Asset Management, que pese a mantener discrepancias con la directiva del banco, el pasado 3 de noviembre dio un voto de confianza para el cambio, después de que el diario Financial Times publicase en julio que la entidad buscaba cambiar la cúpula de la empresa.
China y Corea serán las siguientes regiones en las que el banco intentará convencer a sus inversores de que el nuevo plan es viable. Uno de los principales puntos que juegan a su favor es su sólida presencia en estos países, donde otras compañías esperan todavía poder aprovechar el potencial de los nuevos ricos para desarrollar sus modelos de banca privada extranjera internacional.