El pago de las pensiones en España está siendo posible gracias al Fondo de Reserva, que ya solo cuenta con 24.000 millones de euros. ¿Cuánto tiempo de vida le queda al actual sistema de pensiones? Las pensiones públicas se pagarán siempre porque son el resultado de un pacto social aceptado y asentado. El interrogante que […]
Dirigentes Digital
| 10 nov 2016
El pago de las pensiones en España está siendo posible gracias al Fondo de Reserva, que ya solo cuenta con 24.000 millones de euros. ¿Cuánto tiempo de vida le queda al actual sistema de pensiones? Las pensiones públicas se pagarán siempre porque son el resultado de un pacto social aceptado y asentado. El interrogante que pende sobre las pensiones públicas es su generosidad futura. Este sistema está diseñado para funcionar de forma sostenible, porque la evolución a largo plazo de la sociedad y de la economía tiende a generar mejoras de productividad, que se comunican a los salarios. Este sistema, sin embargo, se ha comenzado a ver comprometido en las últimas décadas, no por un efecto económico, sino por un efecto demográfico. Mantener el nivel de generosidad actual de las pensiones será cada vez más difícil. Lo cual no quiere decir, necesariamente, que debamos resignarnos a que cobraremos menos que nuestros padres y abuelos; quiere decir que tenemos que repensar el sistema y buscar las vías para mantener sus niveles de generosidad. Es cierto que el Fondo de Reserva se está consumiendo. Pero dicho excedente está pensado para ser utilizado en épocas adversas, como las actuales. Sin embargo, no se puede negar que el hecho de que se haya llegado a consumir el Fondo para pagar prestaciones nos envía dos mensajes: que puede haber un problema a corto plazo por el que debamos echar mano de alguna medida de equilibrio provisional y que el sistema tiene vulnerabilidades. La situación que hoy tenemos se puede repetir dentro de algún tiempo y debemos aspirar a que el sistema de reparto sea capaz de responder a ello mejor de lo que lo ha hecho en este caso. Para usted, el sistema debe reformarse y dirigirse hacia la equivalencia actuarial. ¿Es un objetivo realizable en el corto plazo? Es evidente que las reformas hay que plantearlas en calendarios razonables. Puede leer la entrevista completa en la revista DIRIGENTES del mes de noviembre