Standard & Poor’s desataba las alertas: la agencia de calificación crediticia calificaba a Twitter como BB-, es decir, bono basura. La reacción del mercado no se hacía esperar y el valor de sus acciones se dejaban cerca de un 6% en el parqué neoyorquino, dando su último cambio en los 43,2 dólares. ¿Qué ha hecho […]
Dirigentes Digital
| 17 nov 2014
Standard & Poor’s desataba las alertas: la agencia de calificación crediticia calificaba a Twitter como BB-, es decir, bono basura. La reacción del mercado no se hacía esperar y el valor de sus acciones se dejaban cerca de un 6% en el parqué neoyorquino, dando su último cambio en los 43,2 dólares.
¿Qué ha hecho Twitter para merecer esta calificación? Standard & Poor’s alega que la compañía ofrece un rentabilidad muy baja lo que convierte su valor sólo apto para las carteras de más riesgo. La compañía estadounidense, que emitió bonos convertibles hace dos meses por 1.400 millones de dólares, podría no devolver la inversión, según la agencia.
Tal es así, que S&P aseguró en su nota que Twitter "está invirtiendo agresivamente para crecer. Teniendo en cuenta el nivel de reinversión del negocio, la compañía no puede generar flujo de caja discreccional positivo hasta 2016".
De momento, la plataforma social parece confirmar estas malas perspectivas con sus resultados trimestrales ya que, desde julio hasta septiembre, registró pérdidas de 175 millones de dólares. De nuevo, los miedos a una nueva burbuja puntocom saltaban al mercado. Pero, ¿se puede repetir la historia?
Twitter, que salió a cotizar en noviembre de 2013 a 26 dólares por acción, tiene más de 200 millones de usuarios. Es decir, los miembros de la red suponen la población conjunta de Alemania, Francia, Reino Unido, Portugal y Bélgica juntos. Aunque protagonizó un debut menos tormentoso que Facebook, las dudas sobre si llegaría a ser una empresa rentable estaban sobre la mesa.
Un año después, la incógnita sigue sin despejarse y eso se nota en su evolución en bolsa ya que sus acciones se dejan casi un 40% en lo que llevamos de año, hasta los 40,68 dólares. La mejora de la monetización y el compromiso y crecimiento de los usuarios son los dos puntos débiles de su modelo de negocio.
Un negocio en duda
Aún así, los analistas de Citi siguen "neutrales" con el valor, aunque no ven mucho recorrido en su acción ya que, en sólo un mes, han rebajado su precio objetivo desde los 53 hasta los 47 dólares. Para el banco de inversión, el beneficio antes de impuestos a largo plazo sigue en un margen del 35-40%, lo que consideran algo por debajo de otras compañías digitales como Facebook o Google.
Citi también destaca la fuerte inversión que está haciendo Twitter y, aunque apuesta por su negocio, reconoce que si la monetización no mejora más rápidamente y la fuerte inversión realizada no da sus frutos, la compañía tendrá problemas. Por lo tanto, sólo queda esperar para saber si Twitter despeja fantasmas o si, por el contrario, rompe la burbuja.