Es un hecho. Los enormes balances de los bancos centrales y la enorme cantidad de dinero que se ha inyectado para ayudar al sistema financiero global en los últimos años de crisis han vuelto a poner sobre la mesa un grave problema que en ocasiones el mercado olvida entre reuniones de política monetaria y conflictos […]
Dirigentes Digital
| 10 oct 2014
Es un hecho. Los enormes balances de los bancos centrales y la enorme cantidad de dinero que se ha inyectado para ayudar al sistema financiero global en los últimos años de crisis han vuelto a poner sobre la mesa un grave problema que en ocasiones el mercado olvida entre reuniones de política monetaria y conflictos geopolíticos. Se trata de la abultada deuda ha quedado en el sistema y que previsiblemente seguirá subiendo en los próximos meses.
En sus últimas Perspectivas Trimestrales sobre los mercados financieros, Saxo Bank advierte que, en la última década, la deuda externa de Asia se ha disparado hasta los 2,5 billones de dólares desde los 300.000 millones, "mientras que China se está gastando una fortuna solo en gestionar una deuda que alcanza el 39% del PIB".
Los expertos lo tienen claro: "En EE UU la situación no es mucho mejor: los intereses sobre la deuda estatal estadounidense supusieron un 6% del presupuesto en 2013, a pesar de que los tipos eran prácticamente insignificantes, y la carga crediticia se ha multiplicado casi por dos, hasta alcanzar el 80% del PIB en 10 años". El banco explica que, en este escenario, el mundo occidental sigue pasando por alto la necesidad una reforma estructural fundamental "que permita asentarse y crecer hacia una la iniciativa privada".
"Es hora de hablar de la deuda. Puede que se trate del elefante en la habitación que nadie quiere mencionar, pero en estos momentos su magnitud es tal que hace temblar los cimientos", advierte Steen Jakobsen, Economista Jefe de la entidad.
A su juicio, la brecha entre la situación económica real actual y la percepción que se tiene de la misma nunca fue mayor. Y explica que solo hay dos maneras de reducir la deuda: cancelándola o a través de un mayor crecimiento. "No es viable desde una perspectiva política o realista de cara al próximo trimestre, lo que supone que en términos generales los tipos de interés deberían mantenerse sin cambios, o incluso bajar, mientras disfrutamos una vez más de la estrategia de disimular y alargar antes de que Minsky ocupe su lugar en las portadas".
Este momento Minsky hace referencia al instante en el que los inversores sobreendeudados se ven obligados a vender incluso sus inversiones más sólidas para poder pagar sus préstamos.
A pesar de las advertencias, para Saxo Bank la renta variable cuenta aún con una valoración bastante correcta "y no está en ningún caso en zona de burbuja". Peter Garnry, Jefe de Estrategia de Renta Variable de la firma, propone tres ideas de trading en el contexto actual: "Recomendamos ponerse largos en el sector del gas natural de EE.UU. tras el derrumbe del 21% desde los máximos de junio, cortos en India ante la elevada valoración sin justificación y apostar por sorpresas económicas negativas; por último, largos en Goldman Sachs ante un repunte de la economía de EE UU y la actividad en los mercados de capital".
