Aunque tengamos la vista puesta en lo que ocurrirá durante 2016, no debemos olvidar lo que ha pasado durante los últimos meses (y años) en el mercado ya que condicionará el futuro de los fondos, los índices y la renta fija. Para ello, hay que echar la vista atrás cinco años y remontarnos a lo […]
Dirigentes Digital
| 30 nov 2015
Aunque tengamos la vista puesta en lo que ocurrirá durante 2016, no debemos olvidar lo que ha pasado durante los últimos meses (y años) en el mercado ya que condicionará el futuro de los fondos, los índices y la renta fija. Para ello, hay que echar la vista atrás cinco años y remontarnos a lo que sucedió cuando la crisis ya se había instalado en las principales economías del mundo de la mano de BNY Mellon.
2010
Aunque ya parece muy lejano, en 2010 China superó a Japón como la segunda mayor economía del mundo. Además, las últimas tropas estadounidenses abandonan Irak, tras más de siete años de conflicto armado. Si nos fijamos en Latinoamérica, Dilma Rousseff se convierte en la primera mujer en la presidencia de Brasil, mientras que la Reserva Federal (Fed) da comienzo a su nuevo programa de QE. La renta fija pierde terreno ante la noticia.
En el ámbito político, la líder de la oposición birmana, Aung San Suu Kyi, es liberada de su arresto domiciliario tras estar encarcelada desde 1989 y en Túnez, las protestas populares marcan el inicio de la "Primavera Árabe". Durante este periodo, las autoridades consideraron que para lograr un crecimiento sostenible eran necesarios mayores niveles de intervención económica, regulación manipulación del mercado. Por ello, el descenso de las rentabilidades por cupón (TIR) de la deuda pública aumentan el atractivo de activos de riesgo como la deuda high yield y de mercados emergentes.
2011 y 2012
Durante 2011, los mercados vivieron una auténtica revolución como el impasse en la negociación sobre el techo de deuda provoca escasez de treasuries estadounidenses o el desplome de los mercados globales ante los temores de que Italia y España se vieran arrastradas más si cabe en la crisis de deuda de la eurozona. Estados Unidos pierde su calificación crediticia AAA.
Además, el oro alcanzó un máximo histórico de 1.921 dólares por onza, ante los temores de un profundo bajón económico a nivel mundial, mientras que la muerte de Muammar Gaddafi pone fin a 42 años de tiranía en Libia.
Saltando a 2012, la crisis de la eurozona sigue haciendo estragos. Standard & Poor’s revisa a la baja las calificaciones crediticias de Francia, Malta, Italia, Portugal y España. Por otra parte, Siria inicia su descenso hacia la guerra civil. En el caso de los bancos centrales, Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo, promete "hacer lo que haga falta" para preservar el euro. Las bolsas y la moneda única responden con subidas, mientras que las rentabilidades por cupón de la deuda europea caen desde sus máximos previos. Al otro lado del Atlántico, la Fed lanzaba una tercera ronda de su programa de flexibilización cuantitativa (QE), mientras Barack Obama era reelegido como presidente de los Estados Unidos.
Tampoco podemos olvidarnos de Japón, donde Shinzo Abe era elegido para su segundo mandato como primer ministro. La depreciación del yen, el repunte de las acciones y la reanudación del crecimiento económico se atribuyen a la "Abeconomía", su programa económico que abarca reformas, gasto público y un aumento de la oferta monetaria.
Esta situación hizo que muchos países del mundo,tanto desarrollados como emergentes, atravesaban una fase de "realineamiento", no solo en relación a las pautas de dominio económico mundial, sino también en términos del reequilibrio interno de sus economías nacionales. El resultado fue la apreciación estructural (aunque volátil) de las divisas del mundo emergente; desarrollo de los mercados de renta fija denominada en moneda local.
También vimos cómo el anclaje de los tipos de cambio entre ciertas divisas conducía a políticas monetarias inadecuadas y supone el riesgo de burbujas de activos/consumo/infraestructura en los mercados emergentes.
2013
Ya en 2013, el oro sufre su mayor caída porcentual diaria en 30 años, debido en parte a los menores temores de que la QE vaya a provocar una subida de la inflación. Ben Bernanke, presidente de la Fed, anuncia una "reducción gradual" (tapering) del programa de QE estadounidense. En unos mercados presa del nerviosismo, la renta variable y la deuda a corto plazo pierden terreno, mientras, la rentabilidad (TIR) del bono del Tesoro de EE.UU. a 10 años ha subido más de 130 puntos básicos desde mayo.
En el ámbito político, las protestas en la plaza Euromaidán de Kiev marcan el comienzo del conflicto entre Ucrania y Rusia. Decíamos adiós al año con una triste noticia ya que Nelson Mandela, presidente de Sudáfrica de 1994 a 1999, fallecía en el mes de diciembre.
En los mercados, mientras tanto, la intervención económica, regulación y manipulación del mercado conducía, según BNY Mellon, a una mayor volatilidad, a una inflación injustificada de los precios de los activos y a una distribución ineficiente del capital. Además, la burbuja crediticia dejaba muchas economías con unos niveles de endeudamiento que debilitan sustancialmente sus perspectivas económicas. Por ello, la entidad anticipaba un periodo prolongado de crecimiento relativamente bajo y con mayor volatilidad económica. Por otra parte, las perspectivas de China inspiran una extrema cautela.
2014
En marzo de 2014, las acciones del sector minero se desploman ante señales de ralentización del crecimiento en China y de menor demanda de materias primas. Los precios del mineral de hierro caen más de un 8% en un día, la mayor caída porcentual diaria de su historia. Además, el BCE implementa tipos de interés negativos con objeto de estimular la flaqueante economía de la región.
Ya en agosto, los temores de deflación se ciernen sobre la eurozona; la inflación alcanza un mínimo de cinco años del 0,3%. Aumenta la presión sobre las autoridades monetarias europeas para la implementación de estímulo cuantitativo. En octubre, la Fed estadounidense pone fin a su programa de QE tras acumular unos 4,5 billones de dólares en activos. La creciente divergencia entre las rentabilidades por cupón de la deuda estadounidense y las de la europea refleja la brecha existente en los ritmos de recuperación económica de ambas regiones.
Por su parte, la OPEP no logra un acuerdo para recortar la producción de petróleo, precipitando una fuerte caída de los precios del crudo. Esto hace que, en diciembre, el crudo Brent caíga hasta los 59,27 dólares por barril, su nivel más bajo desde 2009. En el ámbito político, se declaran concluidas las operaciones de combate de la coalición internacional en Afganistán.
También pudimos ver cómo las economías modernas orientadas al consumo empleaban mucha energía, y las emergentes impulsan el crecimiento general de la demanda energética. Se hacían necesarias mejoras sustanciales en productividad, tecnología e infraestructuras para compensar los obstáculos al crecimiento económico y la rentabilidad de las inversiones. Además, el bajo crecimiento económico en Europa y en los países emergentes provocaba una nueva caída de las rentabilidades por cupón de la deuda pública.
2015
Con esta situación llegábamos a 2015, año en el que el BCE decidía poner en marcha un programa de flexibilización cuantitativa por un importe total de 1,1 billones de euros. En el mes de enero, Alexis Tsipras era elegido primer ministro de Grecia y se iniciaba un largo proceso de negociación entre los acreedores del país heleno y su nuevo gobierno izquierdista. Los temores de una salida de Grecia de la eurozona reavivaron la preocupación en torno al futuro de la moneda única.
En febrero, marcando seis años de alzas consecutivas, el índice S&P 500 rompe por primera vez en la historia la barrera de los 2.100 puntos y cierra en 2.100,34. Mientras que la ralentización de la economía china continúa protagonizando titulares: el primer ministro Li Keqiang reduce el objetivo de crecimiento del gigante asiático del 7,5% a cerca del 7%.
En abril, el Banco Central de Rusia baja su tipo de interés por tercera vez, del 14% al 12,5%. La deuda pública alemana experimenta su segundo día consecutivo de caída histórica, arrastrando a la baja a otros instrumentos de gran parte del continente. En cambio, el chino recorta su tipo de interés de referencia por tercera vez en medio año.
Con el verano, Grecia anuncia un referéndum sobre el programa de rescate para el 5 de julio, e impone controles de capital. Moody’s rebaja nuevamente la nota de la deuda griega a caa3, manifestando su expectativa de que el país incumplirá si no recibe respaldo adicional de sus acreedores oficiales. El calor estival también nos trajo el crash de la bolsa china mientras el parlamento griego aprueba el paquete de reformas en el marco del rescate.
La influencia de China en el panorama económico mundial y en los mercados de capitales ha crecido exponencialmente desde que el país experimentara su última recesión oficial, en los años noventa. Hoy en día, el gigante asiático ha dejado de ser un país que los inversores puedan permitirse ignorar. Su reequilibrio no será fácil, pero probablemente presentará oportunidades de inversión atractivas, así como riesgos.