"Un bot es un usuario que no piensa en el contenido que comparte, que no genera contenido original y cuyo comportamiento puede ser normal en ocasiones" explica Emilio Ortiz, director de Data Science de Séntisis y PHD en Applied Machine Learning por la Universidad de Alcalá. "Sin embargo, un usuario humano puede tener un comportamiento […]
Dirigentes Digital
| 11 jul 2016
"Un bot es un usuario que no piensa en el contenido que comparte, que no genera contenido original y cuyo comportamiento puede ser normal en ocasiones" explica Emilio Ortiz, director de Data Science de Séntisis y PHD en Applied Machine Learning por la Universidad de Alcalá. "Sin embargo, un usuario humano puede tener un comportamiento ‘bótico’ en un determinado momento y no por ello serlo. A todas las interacciones generadas de esta manera las llamamos conversación bótica". Puede parecer que un 1% de usuarios es un porcentaje poco significativo, pero en una red social con tantos usuarios, supone un total de 3 millones de bots, una cifra más que respetable y digna de analizar en detalle.
La palabra bot tiene un contexto negativo, pero no tiene por qué ser malo. Existen bots que informan sobre el tráfico, el tiempo o los precios de la gasolina, y que generan una información muy útil. Además, pueden ayudar a los internautas a resolver sus dudas a las horas en las que no haya una persona detrás del ordenador.
Séntisis ha desarrollado una investigación para poder filtrar la conversación bótica y analizarla de forma independiente. Las conclusiones que han sacado son:
Algunos bots, para evitar ser identificados por Twitter, tienen nombres y apellidos generados automáticamente y descripciones estándar que usan refranes. Además, se siguen entre ellos e incluso dejan de publicar cada cierto tiempo y generan nuevas cuentas.
En su investigación, Séntisis ha conseguido identificar este tipo de usuario cruzando la semántica con momentos temporales, es decir, comprobando qué cuentas comparten el mismo contenido sin aportar opinión en un momento justo.