Javier Sáenz de Cenzano, director de análisis para España e Italia, explica que "el objetivo del informe es mejorar la experiencia inversora analizando la forma en la que los partícipes están tratados en distintos países y de esta forma estimular el discusión sobre las mejores prácticas". Según indica, "cada mercado que hemos examinado tiene áreas […]
Dirigentes Digital
| 09 jun 2015
Javier Sáenz de Cenzano, director de análisis para España e Italia, explica que "el objetivo del informe es mejorar la experiencia inversora analizando la forma en la que los partícipes están tratados en distintos países y de esta forma estimular el discusión sobre las mejores prácticas". Según indica, "cada mercado que hemos examinado tiene áreas que se pueden mejorar, y esperamos que nuestra investigación sobre la experiencia de los inversores en fondos a nivel mundial ayude a servir como catalizador para un cambio positivo".
Para la elaboración del informe, Morningstar evalúa los países en base a cuatro categorías que han sido ponderadas para calcular la nota global: Regulación e Impuestos, Transparencia, Comisiones y Gastos, y Ventas y Media. Los analistas favorecen en principio una regulación activa sobre fondos, una baja tasa impositiva para los partícipes, una mayor transparencia, unas menores comisiones, un sistema variado de distribución de fondos y unos medios locales que ayuden a los inversores sobre sus decisiones de inversión.
Y en el ranking, España baja posiciones. Frente a una nota B- que obtuvo en 2013, el país recibe ahora una nota C, situándose solo por delante de países como Francia, Hong Kong, Singapur, Sudáfrica (todos ellos también con nota C), Italia y Japón (C-) y China (D+).
Algunos de los motivos que han impactado negativamente en esta nueva revisión son los relacionados con los costes, la información sobre los gestores y la estructura de distribución de fondos. "Por ejemplo, España permite a los fondos aplicar una comisión variable pero sin una reducción en caso de obtener una rentabilidad negativa", explican los expertos. Sin embargo, recuerdan que los términos de las comisiones variables están claramente establecidas en la documentación del fondo. Otro de los aspectos negativos es que, en términos de Ventas y Medios, menos del 20% de los fondos vendidos en España lo están a través de un sistema de arquitectura abierta.
Del mismo modo, el informe destaca que en los folletos informativos de los fondos, no siempre queda clara cuál es la estrategia del fondo "ni es lo suficientemente específico para ayudar a los inversores a comprender plenamente el objetivo de inversión del producto".
La nota española podría haber sido peor de no ser por ciertos factores positivos, especialmente los relacionados con los impuestos. Hay que recordar que el país cuenta con una de las regulaciones fiscales más favorables para los partícipes, con la posibilidad de diferir el pago de impuestos por las ganancias patrimoniales, ya que solo tributa cuando se produce el reembolso y no mientras se mantiene el ahorro en el mismo, ni cuando se hace un traspaso a otro fondo. También puntúa positivamente en cuanto a la transparencia de las carteras, con más de dos tercios de los fondos que las comunican de forma mensual.
Sorpresas positivas
Corea se ha colocado a la cabeza del ranking, subiendo su nota hasta A, desde el B+ que registró en 2013. Entre los factores que han contribuído a esta subida, está la mejora en las prácticas de venta. Ahora, es el único país junto a EEUU que consigue la nota máxima. La primera potencia mundial lo ha logrado este año por cuarta vez consecutiva. Sin embargo, los expertos explican que "aunque EEUU registra unas comisiones relativamente bajas y una fuerte transparencia, consigue una nota media en el apartado de Ventas y Medios".
Holanda también ha logrado elevar su nota hasta A- en 2015, comparado con un B en 2013, al mostrar una mejora en los apartados de Comisiones y Gastos y Ventas y Medios debido a la nueva prohibición respecto a la aplicación de comisiones de asesoramiento.
En el otro extremo de la balanza se sitúa China. El único país con una nota D+, la peor del conjunto analizado. La decisión de Morningstar se basa en los altos costes, las limitaciones a las inversiones extranjeras y las restricciones que sufren los fondos extranjeros en la región.
Las conclusiones del informe también reflejan cómo prácticamente todos los mercados han adoptado o actualizado nuevas regulaciones en los últimos dos años, "lo que muestra un compromiso activo por parte de los reguladores de los países en los que Morningstar ha realizado este informe", indican los expertos.
Desde la firma indican también cómo en EEUU, Australia, Sudáfrica y Holanda, los gastos de los fondos están generalmente desagregados, lo que reduce las comisiones reportadas. Sin embargo, si los inversores pagan tanto por la asesoría como por la plataforma de administración, el coste total de poseer un fondo puede ser entre un 1% y 1,5% más caro.
En 22 de los 25 países analizados, los bancos y las compañías de seguros han sido nombrados como unos de los canales de distribución dominantes. El canal siguiente más mencionado, citado en siete países, son los asesores financieros independientes.