El auge de la inversión sostenible y socialmente responsable ya es un hecho. Las cifras que dan todos los expertos muestran que en 2020 y en plena pandemia Covid-19, incluso se ha elevado. Y es que sin duda esta temática ha sido una de las protagonistas en los Private Markets Days de Allianz GI, donde […]
El auge de la inversión sostenible y socialmente responsable ya es un hecho. Las cifras que dan todos los expertos muestran que en 2020 y en plena pandemia Covid-19, incluso se ha elevado.
Y es que sin duda esta temática ha sido una de las protagonistas en los Private Markets Days de Allianz GI, donde el experto en el sector, Matt Christensen, Global Head of Sustainable and Impact Investing, ha participado.
El entendido, que ha fichado la gestora el pasado mes de diciembre de 2020, ha explicado cuál es la perspectiva con la que los inversores tienen que ver la inversión responsable y cómo podemos anticiparnos a la demanda.
Para el experto, es fundamental tener claro los pasos de la estrategia de este tipo de inversión, que difiere de la habitual.
De esta manera, los puntos a tener en cuenta son, en un primer lugar que el objetivo de esta inversión es generar un impacto ambiental y/o social y además que existe una correlación entre la inversión y el impacto positivo obtenido.
En tercer lugar que esos impactos sociales o medioambientales podamos identificarlos y medirlos, y tener un informe que nos permita validar esa medición.
Por otro lado, el experto ha considerado destacar que los Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS) y que se aprobaron en 2015 por unanimidad en las Naciones Unidas, son sin duda “una arquitectura también muy interesante para los inversores”.
Compuestos de 17 objetivos, a cada tipo de inversión podemos asignarle una de ellas y así tener una fotografía de cuáles son los más capitalizados.
Christensen indicaba en la ponencia que tuvo lugar el jueves, que el 73% de las inversiones sostenibles están recogidas en los ODS de la ONU, de los cuales se pueden obtener resultados medibles.
En este listado, los cuatro primeros temas de impactos en los que más se invierte son de carácter sociales, tales como el trabajo digno y el crecimiento económico, la lucha contra la pobreza y la salud y el bienestar. En el quinto puesto ya podemos observar uno climático, que marca el 57% y que se trata de energía limpia.
Y es que sin duda el mensaje principal es que el mercado de la inversión sostenible está en pleno crecimiento. Estos últimos años han demostrado que los inversores que apuestan por este llamado en ocasiones “capitalismo moral” no va reñido para nada con la rentabilidad de sus inversiones.
Así, en el gráfico de Allianz GI se puede observar el gran crecimiento que experimenta la inversión sostenible entre 2018 y 2019 y como las previsiones apuntan a que en 2030, las necesidades de inversión en sosteniblidad alcanzarán los 1.200 millones.
Fuente: Allianz GI
Para el experto de la gestora, esta tendencia al alza responde fundamentalmente a cuatro puntos, tales como la voluntad de los inversores de apostar por la inversión sostenible; la reubicación estratégica de las empresas privadas; un programa político y una reglamentación más estricta, tal y como estamos viendo en la Unión Europe con los recientes SFDR, el acuerdo de París o el compromiso de China para las cero emisiones de carbono para 2060; y los cambios sociales, tanto de consumo como de mentalidad, que hacen cambiar sin duda la dirección del capital. “Asistimos a un cambio de mentalidad que conduce la generación millennial”, aclara el entendido.