Tras tres semanas de fortísimos desplomes en las bolsas, el mercado de la renta variable parece que comenzó a coger algo de aire. “La muy exagerada sobreventa que arrastraba el mercado tenía que reventar algún día y lo ha hecho. Seguimos copiando exactamente lo que pasó en el crash de 1929, hemos rebotado en el […]
Tras tres semanas de fortísimos desplomes en las bolsas, el mercado de la renta variable parece que comenzó a coger algo de aire. “La muy exagerada sobreventa que arrastraba el mercado tenía que reventar algún día y lo ha hecho. Seguimos copiando exactamente lo que pasó en el crash de 1929, hemos rebotado en el mismo sitio”, señalan en Serenity Markets.
A esto hay que sumar los fuertes planes de estímulos que han puerto en marcha en Estados Unidos, que se unen a los del BCE y a los que ya aplicó China hace varias semanas. El Senado y la Casa Blanca llegaron a un acuerdo para activar un plan de gasto especial de 2,3 billones de dólares que irían a parar a empresas, familias y otro tipo de impulso económico. A esto se le suma la compra ilimitada de deuda por parte de la Reserva Federal y la bajada de los tipos de interés al rango del 0-0,25%.
Con este escenario, muchos inversores se preguntan si es un buen momento de comprar acciones y, en caso de hacerlo, dónde están las mejores oportunidades. “La confianza en la capacidad del ser humano para superar obstáculos ha sido, históricamente, una de las inversiones con mayor ratio de acierto y mayor generación de rentabilidad. Esta no va a ser una excepción. Detrás de la presión mediática y del pesimismo inevitable, hay cosas importantes que están cambiando a mejor”, explican José María Díaz Vallejo y Juan Díaz-Jove, gestores del fondo de renta variable Rentamarkets Narval. Estos expertos aseguran que su apuesta actual se centra en la compra de empresas de calidad que han caído entre un 40 y un 60% en las últimas semanas.
“Cuando finalice el masivo encierro doméstico, la velocidad del dinero volverá a crecer y con fuerza. Por este motivo desconfiamos de la liquidez y entendemos la inversión en bolsa como la alternativa necesaria. Las regulaciones en materia de seguridad y salubridad se van a endurecer en todos los sectores y las empresas débiles que no puedan alcanzarlos desaparecerán; la ventaja será para las empresas grandes, globales y financieramente fuertes”, añaden.
A esto se añade la última previsión de Bank of America, que prevé un potencial alcista del 25% en el Stoxx 600 en agosto, una vez que mejoren los indicadores de actividad en Europa.
Sectores
Las compañías de supermercados que cotizan en Bolsa están siendo los ganadores preliminares de la crisis, si bien el experto de eToro, Adam Vettese, advierte sobre las dudas que hay sobre la sostenibilidad de esta tendencia: "Es difícil de predecir. La realidad es que no sabemos cómo de disruptiva será la pandemia para las cadenas de suministro de los supermercados y si las ventas se verán golpeadas o no en el futuro". Si bien Vettese destaca cómo, por ejemplo, la cadena británica Morrison ha informado de un incremento de las ventas de las superficies comparables (like for like) de "un impresionante 5% en las seis primeras semanas del año. Las imágenes bien documentadas de largas colas y estantes vacíos en todo el país indican que los inversores probablemente están contando con que los supermercados lo van a hacer bastante mejor que otros muchos negocios a lo largo de la crisis del coronavirus ya que los consumidores preocupados acumulan bienes esenciales".
La reacción de los mercados ha sido vender acciones de compañías value, sobre todo, del sector financiero y materias primas. Quizá, no es algo que llame la atención dados los temores por el impacto del coronavirus, ya que son empresas muy cíclicas. “Sin embargo, estas empresas tienen hoy en día algunos de los balances más sólidos del mundo, lo que, unido a sus atractivas valoraciones y a un riguroso proceso de selección, hace que algunas de ellas merezcan ser consideradas por quienes están dispuestos a adoptar una visión a largo plazo”, explican Kevin Murphy, Fund Manager, Equity Value, y Duncan Lamont, Head of Research and Analytics.
Por último, las empresas de reparto de comida, como Domino’s Pizza, Blue Apron y Chewy también son una buena oportunidad, según Jesse Cohen, analista de investing.com. Haris Anwar, por su parte, recomienda mirar a las biotecnológicas como Moderna, Regeneron y Gilead.