Muchos vaivenes en los últimos tiempos está bañando de una rareza que había quedado en el rincón del olvido a los mercados. Y es que la atención de los inversores está centrado en la macro, la deuda y las tensiones geopolíticas, todas ellas derivadas de la inestabilidad política de Italia, la complicada situación de la UE, necesitada de avances en su integración, la caída del crecimiento, la subida del petróleo y los movimientos geoestratégicos de Trump en Oriente Medio y Corea.

De esta manera, los inversores han de estar pendiente a la evolución de los movimientos del mercado en ara de pescar activos que doten de valor a las carteras. Por eso, José Iván García, CIO de KAU Markets EAFI, apunta que estos eventos están creando “oportunidades de compra” denido a la volatilidad que están generando de la que se puede “recoger los frutos cuando el mercado vuelva a la racionalidad”, dado que el entorno es muy positivo para todo aquel que sea capaz de mantener la calma y construir carteras de renta variable “a uno o dos años”.

El experto también señala, pese a lo que se está viendo, el menor riesgo “está en invertir en renta variable de la zona euro, huyendo de la renta fija que nos obliga a asumir riegos para obtener retornos del 1%, evitando el riesgo moneda y aprovechando las oportunidades que se están produciendo en los mercados europeos”.

Siguiendo este esquema donde habría mayor atractivo, sería “en Alemania o Francia”, que son regiones en las que “el ecosistema empresarial es más eficiente y sufren menos problemas políticos y de deuda. Por sectores, apostamos fuertemente por el sector tecnológico europeo”, que será clave para el crecimiento de los próximos años y que cotiza muy por debajo de sus homólogos americanos. Entre las tecnológicas que nos gustan están Aures Technologies o Keyrus.

Asimismo, en España podemos encontrar algunas buenas empresas que cotizan baratas, como Mediaset o Azkoyen, y algunas otras que presentan buenas oportunidades debido a sus bajos precios.

Por el contrario, García ahonda en que son partidarios de estar alejados de los bancos, que “van a ser un foco importante de volatilidad, como ya estamos viendo, y de mercados en los que nuestras inversiones tengan que realizarse en monedas débiles”.