El Grupo de infraestructuras, agua y energía puso fin al último ejercicio con un aumento en sus ingresos de un 71%. Con ello registra unos ingresos de 100,4 millones de euros, superando así las previsiones. Asimismo, la compañía anotó un ebitda de 10,3 millones, es decir, un 34% más que en el anterior año. 

Ante estos resultados, el presidente de la corporación, Federico Ávila, destacó que “estos datos reafirman el buen momento de la empresa y nos mantienen muy por encima de los objetivos marcados en nuestro Plan Estratégico 2022”. En línea con esto, para el presente año estiman que podrían tener un crecimiento de un 20% y una facturación de 120 millones, un 44% más.

Lantania logró en 2019 una cartera de obra en curso valorada en 285 millones de euros y en el transcurso del ejercicio el Grupo se adjudicó obras por un importe de 110 millones de euros, casi cuatro veces más a la cantidad obtenida en 2018. Hay que dividir en dos porcentajes estos proyectos: por un lado, el 55% de la nueva contratación proviene del sector público, mientras que el 45% restante viene del privado. 

Entre estos proyectos se puede destacar la conservación del área de accesos del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas para Aena, la ampliación de la Autovía A-66 en Asturias, la remodelación de las estaciones de tren de Mérida y Badajoz o la electrificación del primer tramo del AVE a Extremadura. 

En palabras del presidente de la compañía, 2019 ha sido un “año de consolidación”, mientras que “durante 2020 seguiremos trabajando para cerrar nuevos acuerdos y nuevas adquisiciones que refuercen la senda de crecimiento del Grupo”.

En línea con esto, dentro de los planes de afianzar su desarrollo y profesionalización, el Grupo ha constituido su Consejo de Administración. “La creación de este consejo supone un paso natural en la evolución de la estructura de gobierno corporativo de Lantania y reafirma el apoyo de los socios en el desarrollo y futuro de la compañía”, señala Ávila.