Encontrar un empleo puede cambiar la vida de quien lo busca. Con ese propósito y con la mirada puesta en personas en situación de vulnerabilidad, más de 36.800 trabajadores han encontrado su oportunidad para integrarse en la sociedad gracias al programa Incorpora de "la Caixa".

El proverbio de que "el trabajo dignifica al hombre" ha sufrido distintas modificaciones a lo largo de la historia, pero nunca ha perdido su significado inicial. Trabajar da sentido a la vida de las personas y les permite aportar algo a la sociedad, además de proyectar una imagen propia.

No todas las personas cuentan con las mismas posibilidades de encontrar un empleo. La Fundación Bancaria "la Caixa" es consciente de ello y por eso puso en marcha en 2006 el programa Incorpora, que trata de proporcionar una oportunidad laboral a personas en riesgo de exclusión, de modo que el trabajo sirva para integrarse de nuevo en la sociedad.

Un año más, "la Caixa" ve cómo este esfuerzo da sus frutos, tras haber proporcionado 36.803 empleos a través de 13.613 empresas colaboradoras durante el último año. Así, 2019 supera los 32.609 empleos de 2018 y las 11.217 empresas colaboradoras.

No obstante, el presidente de la Fundación, Isidro Fainé, no se deja impresionar por las cifras y pone el foco en el cambio que supone encontrar un trabajo. "Cada participante se convierte en agente de su propio cambio", explica Fainé, y añade que "cada historia de superación es fruto del trabajo en equipo de nuestra red de entidades sociales, en la que los técnicos tienen un papel clave, acompañando personalmente a cada usuario".

Uno de los pilares del programa es el acompañamiento personalizado. 1.207 profesionales forman parte de un equipo que vela por el éxito de cada persona que busca ayuda para encontrar un puesto de trabajo. De ese modo, los técnicos no solo llevan a cabo un proceso personalizado, sino que también están al tanto de cómo se realiza la contratación y del desempeño posterior de cada beneficiario.

Entre sus tareas, además de las mencionadas, se encuentran la prospección de empresas, el seguimiento del proceso de formación, el acompañamiento laboral, la solución de posibles conflictos, así como fomentar la colaboración de nuevas empresas en el programa.

Esta es la forma de que Incorpora resulte útil a las más de 36.800 personas que ayuda. Cabe recalcar que es preciso que se realice de este modo, ya que entre los participantes se encuentran necesidades y demandas diversas. De esa manera, Incorpora ayuda a personas en la situación de vulnerabilidad, con discapacidad, jóvenes en riesgo de exclusión, víctimas de violencia de género, desempleados de larga duración y exreclusos.

Además, los datos de 2019 reflejan la implicación del programa con independencia de la realidad de cada persona. Del total de inserciones laborales, 19.313 las han protagonizado mujeres, y las 17.490 restantes, hombres. En ese sentido, también se contabilizan 9.428 personas con discapacidad que han encontrado empleo, mientras el resto, 27.375, se encontraban en riesgo o situación de exclusión.

“la Caixa” exporta Incorpora a Portugal, Polonia, Hungría y Marruecos

El éxito del programa ha hecho que "la Caixa" lleve Incorpora a otros países. La metodología de este proyecto se ha exportado a Portugal, Hungría, Polonia y Marruecos, con un balance de 2.598 inserciones durante 2019, que prueban que "el programa Incorpora sigue creciendo año tras año", dice el presidente de la Fundación.

Asimismo, la línea de autoempleo que se inició en 2016 también está ayudando a personas con capacidad emprendedora a llevar adelante sus propios proyectos. Se trata de una fórmula distinta de integrarse en el mercado laboral, para la que Incorpora facilita formación e itinerarios personalizados. Esta línea ha facilitado la creación de 1.356 microempresas durante 2019.