Con el objetivo de contribuir a paliar las dificultades económicas de muchos trabajadores debido a las medidas tomadas para frenar la propagación del coronavirus, Mapfre destinará hasta 24 millones de euros a anticipar la facturación de sus proveedores. Muchos se han visto obligados a detener o ralentizar su actividad por lo que, de esta manera, más de 7.000 reparadores, gruistas, taxistas y otros proveedores que colaboran habitualmente prestando sus servicios a los clientes de la compañía podrán solicitar un anticipo de su facturación.

Además, Mapfre ofrece también un servicio gratuito de asesoramiento, con el fin de que puedan conocer todas las medidas aprobadas en el Real Decreto que declara el estado de alarma a las que pueden acogerse este colectivo y cómo hacerlo. “Queremos apoyar a todos los profesionales que a diario trabajan con nosotros, que atienden a nuestros clientes y se esfuerzan cada día para que el servicio de Mapfre sea de máxima calidad. Ahora es el momento de apoyarles, porque ellos son también una parte esencial de nuestra cadena de valor”, afirma José Manuel Inchausti, CEO de Mapfre España.

De esta forma, esta medida se une a la ya anunciada por la compañía de destinar 30 millones de euros a devolver a sus clientes autónomos y pymes la parte de las primas de sus seguros correspondiente a los días en los que esté en vigor el estado de alarma, y a la donación, a través de Fundación Mapfre, de 5 millones de euros al Consejo Superior de Investigaciones Científicas para acelerar la investigación en España, especialmente aquella relacionada con el Covid-19.

Mapfre, que posee cerca de siete millones de clientes en España, ha desplegado su Plan de Contingencia de Negocio para hacer frente a la situación actual. En este sentido, cuenta con un doble objetivo; por una parte, trata de proteger la salud de sus empleados, colaboradores y clientes, y, por otra, mantiene el servicio con la máxima calidad posible. Desde la compañía anuncian que en este momento, más del 95% de los empleados de la aseguradora en España están trabajando en remoto para reducir el riesgo de contagio y poder garantizar el servicio a los clientes.