Todo tipo de empresas, autónomos y familias necesitan acceder a financiación para crecer o, en ocasiones, para salir de un apuro. Con el propósito de conceder ayuda a quienes lo necesiten, MicroBank ya ha concedido más de un millón de préstamos desde que comenzó su actividad en 2007.

La crisis de la pandemia obliga a las pequeñas empresas, autónomos y familias en dificultades a apretarse aún más el cinturón. Pero tras las fórmulas genéricas se encuentran pequeños proyectos y los apuros diarios en los hogares que necesitan una solución.

Mucho antes de que el nuevo coronavirus hiciera su aparición, CaixaBank, a través del banco social MicroBank, se propuso atender esas necesidades. En particular, las de familias con recursos limitados, autónomos, emprendedores y empresas sociales.

Desde 2007, el año en el que comenzó su actividad, MicroBank ha superado el millón de préstamos concedidos para estos fines, en un contexto tan difícil como el de la crisis de 2008 o la actual crisis sanitaria. En total, MicroBank contabilizaba a finales de junio 1.011.706 préstamos concedidos, que superan los 6.053 millones de euros concedidos.

Estas cifras revelan un incremento del 10,9% en el número de préstamos concedidos con respecto al año anterior. La entidad que preside Juan Carlos Gallego cuenta con el respaldo de 4.100 oficinas de CaixaBank en las que se asesora a familias, autónomos, emprendedores y empresas sociales para tramitar sus créditos.

Asimismo, en el contexto de otra nueva crisis, se han puesto en marcha productos específicos con el fin de impulsar la recuperación económica de los colectivos más vulnerables. Para ello colabora con 600 entidades, cuyo conocimiento de las personas destinatarias resulta esencial. Además, las principales instituciones europeas dedicadas al emprendimiento y las microfinanzas apoyan la actividad de MicroBank, como son el Fondo Europeo de Inversiones, que garantiza parte de los préstamos fallidos, así como el Banco de Desarrollo del Consejo de Europa y el Banco Europeo de Inversiones, cuya financiación se distribuye en condiciones competitivas.

Las familias, principales destinos

De ese millón de créditos, 814.935 han ido a parar a a familias con dificultades para acceder al sistema financiero tradicional. Este segmento ha recibido más de 3.700 millones de euros, lo que representa un aumento del 10% con respecto a junio de 2019, con el objetivo de hacer frente a gastos como salud, educación o reformas en el hogar.

El caso de los autónomos y microempresas representa la otra parte importante de los préstamos. En particular, se busca ayudar a abrir y consolidar negocios, además de fomentar el autoempleo. Para este fin se han concedido 190.884 microcréditos, de modo que la financiación asciende a 2.115 millones de euros, un 14,6% más en comparación con el año pasado.

Por último, cabe destacar la reciente iniciativa de MicroBank, que comenzó en 2019. Se trata de la creación de una línea de crédito destinada a facilitar financiación a iniciativas con impacto social. En particular, apunta a proyectos de economía social, emprendimiento, innovación y salud. Ya se han concedido 5.887 préstamos por un importe de 234,5 millones de euros.